Marruecos se prepara para la formación de un nuevo Gobierno de vida corta
El Gobierno marroquí, que será anunciado próximamente en Rabat, durará sólo unos meses, según fuentes marroquíes. El Gabinete designado por Hassan II va a formarse a los seis meses de las elecciones generales del pasado mes de septiembre.
Además del nombramiento como ministro de Asuntos Exteriores del anterior ministro de Información y ex embajador en España, Abdelatif Filali, el actual primer ministro, Karim Lamrani, ha sido al parecer confirmado en su cargo y ya ha sometido al comentario previo de los seis principales partidos políticos la declaración gubernamental programática que debe efectuar ante el Parlamento después de que el rey designe el Gabinete.
La Unión Socialista de Fuerzas Populares (USFP) rechazó de nuevo la citada declaración programática del primer ministro. El Istiqlal, reforzado por la negativa de la USFP, parece querer vender cara su colaboración. Al menos eso es lo que sugieren las declaraciones del secretario general del partido y ex ministro de Exteriores, Mohamed Bucetta, quien dijo el sábado pasado, ante el comité central de su partido, que tal programa de Gobierno "no responde a nuestras preocupaciones en varios sectores. No vamos a anticipar gratuitamente si participaremos en el Gobierno o no, sino que esperaremos a conocer el número de carteras que se nos concederán y los medios de que dispondremos para aplicar nuestro programa".
Al igual que los demás partidos de la oposición, que han criticado duramente "los fracasos en política exterior", una actividad que dirige personalmente el rey Hassan II, el partido Istiqlal estima, en lo que a España concierne, que "el problema de Ceuta y Melilla ha adquirido una nueva dimensión (debido al progreso de la cuestión de Gibraltar) que requiere que salgamos de la fase de simples declaraciones de principio".
Fórmula gubernamental regia
Al parecer, el nuevo Gobierno durará sólo unos meses, ya que el rey Hassan II desea a toda costa poner en práctica la fórmula gubernamental que él había previsto desde un principio, y que giraba en torno a la participación de los socialistas en el Gobierno. Esta fórmula no pudo realizarse por las reiteradas y rotundas negativas de éstos. La USFP ha aceptado, no obstante, que el jefe de relaciones exteriores del partido, Mehdi Alaui, sea nombrado representante de Marruecos en la ONU.La única innovación parece consistir en la designación de tres vicepresidentes del Gobierno, que pudieran ser el ex primer ministro y presidente de la Unión Constitucional, Maati Buabid; el jefe del Istiqlal, Bucetta, y Haddu Echiguer, por los independientes.
La distribución de carteras se cree que quedará así: seis para el partido Unión Constitucional, ganador de las últimas elecciones; cuatro para el partido de los Independientes del cuñado del rey, Ahmed Osman; probablemente otras cuatro para el Istiqlal, y otras tantas para el Movimiento Popular. Los restantes ministerios serían ocupados por técnicos sin afiliación política. ¡
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