Dos familiares de concejales comunistas de Córdoba dejan el Ayuntamiento

Los dos familiares de los concejales comunistas Ildefonso Jiménez y Rafael Carmona han renunciado a sus puestos como funcionarios eventuales del servicio municipal de recaudación del Ayuntamiento de Córdoba, tras conocer la intención del Grupo Popular de solicitar ante el pleno y los tribunales la dimisión de los citados ediles, en base a la incompatibilidad que la contratación de aquellos producía de acuerdo con el artículo 81 de la ley de Régimen Local.Esta decisión desencadenó en la última reunión de la comisión municipal permanente fuertes acusaciones del grupo comunista contra los representantes conservadores, a quienes responsabilizaron de haber dejado a dos familias sin un puesto de trabajo.

Julián Jiménez y Enrique Carmona, hijo y hermano, respectivamente, de los referidos concejales, habían sido aprobados en unas pruebas selectivas realizadas para ocupar provisionalmente las plazas que, en el criterio del Grupo Popular, no salvaban la citada y manifiesta incompatibilidad.

'Guerra sucia'

El delegado de Cultura, José Luis Villegas, calificó la postura del grupo conservador de "guerra sucia" que pesará sobre sus conciencias y denunció su intención de bloquear los ingresos municipales alterando el servicio de recaudación.Por su parte, el portavoz de Coalición Popular en el municipio Antonio de la Cruz, replicó señalando que sólo había tratado de aplicar la legalidad. "Si con la renuncia de estos dos empleados no marcha bien la recaudación municipal, que dimitan los dos concejales, que es lo único que nosotros hemos exigido".