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El VII congreso del partido en el Gobierno en Cataluña

"Un paladín de fe y esperanza"

Una de las frases pronunciadas ayer por el presidente de Convergència Democràtica, Ramón Trias Fargas, durante el congreso refleja de una manera palpable la personalidad de un partido que gira, hoy más que nunca, alrededor de Jordi Pujol. "Tenemos un líder, Jordi Pujol, que ha dedicado toda su vida a la causa de Cataluña. Con una causa inmortal y un paladín de fe y esperanza no podemos errar", afirmó Trias.A ninguno de los 1.248 compromisarios -entre los que predominan las clases medias-, que participan en el congreso le sorprendió la afirmación de Trias. Ni de que hablara de la "necesidad que tiene Cataluña de reorientar España". Pujol le dio más tarde la razón asegurando que las fórmulas de Alianza Popular y del PSOE ya no son válidas.

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No es casualidad que el centro de atención de este congreso sean los discursos de Pujol y que alrededor de él gire toda la información congresual. Es él, en definitiva, quien dibuja en cada momento el norte del partido y señala los senderos que hay que seguir. Ayer fue su informe como secretario general saliente. Mañana será su alocución como nuevo secretario general. Las sesiones congresuales parecen empezar cuando él habla y terminar cuando Pujol abandona el estrado.

La ponencias, que las hay y tienen títulos tan sugestivos como Una estrategia para la Cataluña del año 2000, se debaten en rápidas sesiones que no precisan maratonianas reuniones nocturnas. La ponencia sobre Política Económica, un escueto documento de 16 hojas, se aprobó tras 75 minutos de debate, admitiendo dos enmiendas y media, todas ellas transaccionadas. No sería que la ponencia no precisara una prudente atención de los delegados asistentes ante temas tan atractivos como el que enunciaba que "el mercado de Cataluña es el mundo y por ello hay que estar preparados para competir".

En un congreso como éste se rompen los tradicionales moldes que adornan en muchas ocasiones este tipo de reuniones. No hay pasillos para pactar candidaturas a los órganos de dirección -sólo se elige presidente, secretario general y secretario de organización, con una única lista, y una tercera parte del Consell Nacional-; no hay temas ideológicos que traumaticen al partido y que precisen de consensos entre los jefes de delegación; y tampoco se producen discrepacias sobre la actuación inmediata del Gobierno de la Generalitat.

Otra de las frases que llamó poderosamente la atención de los delegados fue la definición que Trias Fargas hizo del partido. "Convergència es una institución pedagógica de catalanidad", afirmó el presidente del partido.

Trias será reelegido hoy presidente del partido, pero no está tan claro que en 1987 repita como candidato a la alcaldía de Barcelona. CDC necesita un candidato con mayores posibilidades, sobre todo porque las elecciones municipales son la espina que tiene clavada el partido.

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