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Pujol, preocupado por la redistribución de todas las inversiones del Estado

El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, expresó ayer su preocupación por el hecho de que el reciente congreso del PSOE haya aprobado una cláusula que extiende cierto carácter redistributivo -en función de las rentas de las comunidades autónomas- a todas las inversiones previstas en los presupuestos generales del Estado, y no sólo a las que se regulan a través del Fondo de Compensación Interterritorial. Pujol se mostró cauto, pues señaló que la única referencia que tenía sobre el tema procedía de los periódicos -"una información superficial", dijo-, pero señaló que una política de ese tipo iría contra el espíritu del estatuto de autonomía y de las afirmaciones realizadas por altos representantes de la Administración socialísta.Los diarios, añadió, dicen que esta cláusula se aprobó por 12 votos de diferencia y que los socialistas catalanes se abstuvieron en la votación. Si ha sido así, agregó, "lo lamentaría mucho, porque los votos de éstos hubieran sido decisivos para derrotarla". El Gobierno de la Generalitat se encuentra empeñado en una modificación de las cláusulas que regulan la financiacíón de la comunidad autónoma, que pretende que sea válida para todo el Estado de las autonomías y que, lógicamente, debe ser negociada con el Gobierno central.

Pujol se refería a la votación sobre la enmienda presentada por la delegación de Granada, según la cual la distribución de las inversiones públicas no comprendidas en aquel fondo habrán de tener en cuenta las diferencias de renta existentes en España, además de los criterios de territorialidad y de los sectoriales.

Lluís Maria de Puig, jefe de la delegación del PSC en el congreso del PSOE, señaló anoche que todos los delegados de su partido habían votado contra la enmienda granadina. De Puig afirmó que creía que aquella cláusula no era en absoluto legal y que, por tanto, no se aplicaría. Añadió que los delegados catalanes intentaron que no se presentara, y que la enmienda fue votada tras un dernagógico discurso del delegado que la defendió y dijo también que hacer hincapié en "esta tontería" y olvidarse de que desde este congreso el PSOE tiene por primera vez una verdadera doctrina autonomista resulta demagógico.

El presidente catalán, hablando en una conferencia de prensa convocada para hacer balance de la acción de gobierno de la Generalitat en los últimos meses, manifestó que sería una "interferencia constante", "perjudicial para las autonomías", la voluntad manifestada recientemente por altos cargos gubernamentales de que el Gobierno central mantenga contactos con la Administración catalana sobre las materias cuya competencia ha sido transferida de forma exclusiva a la Generalitat. Pujol reivindicó para la institución autonómica su carácter de representante del Estado en Cataluña, solicitando que, por lo tanto, la relación entre éste y los catalanes pase por la Generalitat en todo lo que ha sido traspasado. Con todo, aceptó excepciones, como por ejemplo la de que aunque la Generalitat tenga las competencias en deportes sea un seleccionador especializado quien, a nivel de todo el Estado, decida qué hombres necesita.

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