España permanecerá en la OTAN aunque no ingrese en la CEE, según Morán
España permanecerá en la OTAN aunque no ingrese en la CEE, según declaró ayer en Bruselas el ministro de Asuntos Exteriores, Fernando Morán, en una conferencia de prensa improvisada tras su entrevista con el secretario de Estado norteamericano, George Shultz. "En el caso, que creo improbable, de que se retrase la entrada de España en la Comunidad, en mi opinión, como Fernando Morán", dijo el ministro de Asuntos Exteriores, "España no puede adoptar una actitud antieuropea, ni neutralista, ni proteccionista, ni de país no alineado".
Morán señaló que "siempre ha sido jugar con fuego" el vincular la OTAN y la CEE, y admitió como "posible, pero improbable", que España no ingrese en la Comunidad en 1986. El ministro español, que asistirá hoy y mañana a la reunión del Consejo Atlántico, no participará hoy, sin embargo, en la sesión previa oficiosa de los titulares de Exteriores de los países miembros del Comité de Planes de Defensa (todos, incluida España, salvo Francia) con los mandos militares de la OTAN y el presidente del Comité Militar, en la que se informará sobre las últimas decisiones militares de la OTAN.Morán explicó que esta reunión "en cierto modo podría presentar una confusión entre los órganos de mandos militares y el Consejo Atlántico, lo que podría tener una lectura a la que no quiero dar pábulo". Morán dijo que su actitud era "una postura de Gobierno", decidida "porque España no tiene definida su postura respecto a la estructura militar", aunque el ministro de Defensa participe en las reuniones del Comité de Planes.
El jefe de la diplomacia española se entrevistó ayer con el secretario de Estado norteamericano, George Shultz, y en la reunión se abordó la propuesta del presidente del Gobierno español sobre política de defensa. Morán aseguró que Shultz tiene claro cuál es la postura del Gobierno español. ¿Hay presiones norteamericanas?, se le preguntó. "No hay presiones; lo que se llama presiones, no. Hay unos manifiestos de voluntad y un deseo norteamericano, que tendrán que conjugarse con lo que es el deseo español", comentó Morán.
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Morán afirma que aún es posible entrar en el Mercado Común el 1 de enero de 1986
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Según Fernando Morán, "los norteamericanos no han expresado nunca un deseo tajante de que nos integremos en la estructura militar" de la OTAN.
Morán y Shultz hablaron también del acuerdo bilateral y decidieron convocar una reunión del Consejo Hispano-Norteamericano para la próxima primavera. "Para esas fechas no habremos solicitado la renegociación del acuerdo", señaló Morán, que abordó con su colega norteamericano la propuesta de reducir la presencia militar estadounidense en España "y valorar más el tratado, haciéndolo más equitativo".
Los dos ministros pasaron revista a la situación internacional -especialmente en el norte de África, que "no es alarmante"-, y Shultz se interesó por el reciente acuerdo hispano-británico sobre la cuestión de Gibraltar.
La vinculación entre los temas de la OTAN y de la CEE es para Morán "artificial y peligrosa", pues, suponiendo que para las fechas en que la opinión pública y el Gobierno decidan la consulta sobre la cuestión de la OTAN, "no se hubiese entrado todavía en la Comunidad, la vinculación jugaría en contra, no ya de una integración militar en la OTAN, sino en contra de la pertenencia", senaló.
Morán dijo no saber cuál será la pregunta del referéndum, "aunque caben tres posiciones lógicas": "¿Acepta usted la propuesta del presidente del Gobierno en todos sus puntos?; ¿desea usted la pertenencia a la Alianza Atlántica sin pertenecer a su estructura militar?, o ¿desea usted que España sea parte del tratado del Atlántico Norte?".
Para el referéndum, según Morán "hay que esperar a ver cuándo se hace y cuál es la situación política española, las ideas y los análisis en curso". "Sigo pensando que es posible ingresar el 1 de enero de 1986 en la CEE", añadió, "pero, si ocurriese de otra manera, efectivamente podría tener sus efectos.
Enorme frustración
Morán consideró que el no ingresar en la CEE "sería una enorme frustración, pero, en mi opinión, la opción europeísta debe ser agotada hasta las heces", porque "los cambios de definición, no ya de política internacional, sino histórica, que supondría serían tan graves que hay que agotar esa vía". "El desengaño y la frustración no nos pueden llevar a conclusiones que no coincidan con nuestra estructura como país europeo", añadió. "Yo defenderé el que no se revise la postura occidental de España", dijo Morán, insistiendo en la "opción europea". ¿Es ésta la del decálogo del presidente, que contempla la no denuncia del Tratado de Washington? "Exactamente", contestó Morán. El no ingresar en la CEE, según el ministro, "produciría la tendencia a denunciar el Tratado de Washington, pero creo que este tratado debe ser analizado en sus méritos, con independencia o no de estar en la CEE".
Pero Morán consideró que "España es un país europeo estando en la OTAN o no estando en ella". Y en la opción europeista incluyó el Consejo de Europa y el proseguir la integración europea. "Incluso si no ingresamos en la Comunidad, no hay que estar contra Europa".
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