Guidoni afirma que trasladó a los activistas la conveniencia de un alto el fuego

El embajador de Francia en España, Pierre Guidoni, comentó ayer, durante un almuerzo con varios periodistas, que merced a sus conversaciones con dirigentes de Herri Batasuna ETA se informó en septiembre pasado de que el Gobierno francés sólo modificaría su actitud favorable a las extradiciones de terroristas vascos si esta organización armada iniciaba una negociación con las autoridades españolas y, paralelamente, realizaba un alto el fuego.Los interlocutores de Guidoni fueron Santiago Brouard y Jokin Gorostidi, ambos dirigentes de la coalición abertzale. En la misma época, según dijo el propio embajador, Guidoni analizó la situación en el País Vasco con dirigentes de Alianza Popular, Partido Comunista de España y Partido Socialista Obrero Español, pero no con los del Partido Nacionalista Vasco "porque ellos no lo pidieron".

Guidoni, según sus comentarios, transmitió a Brouard y Gorostidi los puntos siguientes: el Gobierno francés tiene la firme voluntad de colaborar con el español en la erradicación del terrorismo; las presiones como la quema de vehículos franceses o las manifestaciones antifrancesas no harán cambiar esta actitud; lo único que puede originar una variación es el inicio de discusiones o negociaciones para acabar con la violencia.

Preguntado si también transmitió las consecuencias negativas para ETA que podrían derivarse de la negativa de la organización terrorista a negociar, el embajador respondió: "Evidentemente. Cabe ver lo que ha pasado y lo que sigue pasando". En su opinión personal, sólo cabe una altenativa: "O se hace la paz o se hace la guerra". "La meta de la guerra es conseguir la paz", concluyó.

No obstante, el embajador francés, al ser preguntado si estaría dispuesto a actuar como mediador en unas hipotéticas negociaciones entre el Gobierno y ETA, señaló que no es ése el papel de un embajador y precisó que, en cualquier caso, su planteamiento a los dirigentes de Herri Batasuna era válido en el momento en que lo hizo, pero que la responsabilidad del problema corresponde ahora al Gobierno español.

La embajada francesa difundió ayer una nota en la que se desmiente "cualquier contacto, antes o después de las extradiciones, entre representantes oficiales del Gobierno francés y miembros de organizaciones terroristas vascas". Añade la nota que, a la vista de los documentos periodísticos difundidos recientemente, "ETA Militar estaba, en el mes de septiembre, perfectamente informada" de la posición del Gobierno francés.

"El Gobierno francés no se siente en absoluto concernido por los aspectos políticos del problema vasco y no tiene, por tanto, intención de entrometerse en ellos", concluye la nota.