Los trabajadores de Euskalduna se manifestaron por las calles de Bilbao después de burlar el cerco policial

Los trabajadores de Euskalduna se manifestaron ayer por las calles de Bilbao, burlando el cerco que las fuerzas de la Policía Nacional mantienen en torno al astillero. La manifestación se desarrolló sin incidentes, aunque salpicada de continuas negociaciones con las fuerzas de orden público. Aunque los trabajadores no lograron llegar hasta la sede del Gobierno Civil, sí consiguieron sacar el conflicto de los muros de la factoría a la calle. Unas 2.000 personas, trabajadores de Euskalduna, Astilleros Españoles, se manifestaron ayer pacíficamente por las calles de Bilbao en protesta por los planes de reconversión naval.Desde primeras horas de la mañana los trabajadores, individualmente o en pequeños grupos, abandonaron las instalaciones de la factoría para concentrarse en la plaza Circular. Las entidades bancarias estaban fuertemente protegidas ante el anuncio de que los trabajadores intentarían ocupar estos locales.

Fuerzas de la Policía Nacional bloquearon la calle e impidieron el paso a los manifestantes. Los trabajadores levantaron los brazos mientras coreaban: "Manos arriba, somos sospechosos".

A partir de ese momento se inició una larga negociación con el jefe de la fuerza pública, que repetía una y otra vez su convencimiento de las razones que movían a los manifestantes, pero insistiendo en que sus órdenes eran no permitir estas acciones.

Finalmente, se permitió a los trabajadores que se dirigieran hacia la plaza de Zabálburu. El comandante de la fuerza pública solicitó allí la presencia de los representantes de los sindicatos para llegar a algún acuerdo que evitara el enfrentamiento. Fruto de estas conversaciones fue un nuevo permiso para que la manifestación se dirigiera por la calle de la Autonomía hasta la plaza del Sagrado Corazón, donde se encuentra la entrada a los astilleros. Allí les esperaban efectivos de la Policía Nacional que bloquearon la Gran Vía ante el intento de los manifestantes de dirigirse hacia el Gobierno Civil.

"Somos todos"

La intención de los trabajadores era demostrar al gobernador civil que sus afirmaciones de que no eran más de 40 personas las que realizaban las acciones de protesta" carecían de validez. Así, se gritaban consignas como "Los 40 de la foto somos todos nosotros".

Asimismo, trabajadores de los astilleros de la bahía de Gijón quemaron anoche cuatro ataúdes en la plaza Mayor de esta ciudad en un nuevo acto de protesta contra la reconversión naval, y destrozaron las cristaleras del Ayuntamiento mediante el lanzamiento de bolas de acero, antorchas y cócteles molotov, informa Miguel Somovilla.

En El Ferrol, grupos de trabajadores de Astano interfirieron ayer la actividad de las entidades bancarias en una acción desarrollada bajo la consigna de "abrir una cuenta bancaria y cancelarla pocos minutos después", informa Efe.