La policía abrió una puerta con una bomba en la persecución de un recluso huido

Cuatro personas fueron detenidas ayer en un piso de la calle Estafeta de Pamplona, durante una operación llevada a cabo por la policía para capturar al recluso Jesús María Senosiain Barandalla, evadido el pasado lunes del Hospital de Navarra y a quien se le acusa de ser el supuesto autor de un robo con homicidio en la persona de un joyero de Zaragoza. Para entrar en el inmueble, donde en aquellos momentos no se encontraba Jesús María Senosiain, aunque parece ser que estuvo en el piso, la policía colocó una pequeña carga explosiva en la puerta, que la derribó.

Hacia las 7.30 de la mañana de ayer, la policía montó un fuerte dispositivo en torno a un inmueble de la calle Estafeta, situada en el casco viejo de Pamplona, dado que se tenían noticias de que en el mismo pudiera encontrarse el recluso evadido del Hospital de Navarra. Según informó la Delegación del Gobierno en Navarra, ante el carácter que presentaba el inmueble y el hecho de que el fugado estuviera armado, la policía optó por volar la puerta de entrada del piso.

En el interior de la vivienda la policía detuvo a cuatro personas, cuyas identidades no han sido dadas a conocer. Al parecer, estas personas, entre las que no se encontraba el evadido, que continúa en paradero desconocido, confesaron que Jesús María Senosiain estuvo en el piso en los primeros momentos de su huida del hospital.

Por otra parte, la Policía Nacional ha abierto una investigación para determinar la actuación de los dos agentes que custodiaban a Jesús María Senosiain en el hospital. El recluso fugitivo se encuentra armado con un revólver Astra, dos pistolas automáticas y un subfusil de los policías nacionales que le custodiaban en el hospital y a los que redujo y maniató.