Los clubes aceptan el control de la Administración para recibir dinero de las quinielas

La Administración exigirá absoluta transparencia, evitación de desviaciones presupuestarias y riguroso control en el pago de las deudas de los clubes, "factura por factura", en el supuesto de que la comisión mixta que estudiará el tema del aumento del porcentaje de las quinielas llegue a algún acuerdo antes de finalizar el año, y siempre que los directivos, en su reunión del próximo jueves, faciliten con normalidad el calendario de Liga. Según fuentes del Comité Ejecutivo de la Liga Profesional, se encargará a una empresa auditora el estudio de las bases contables para delimitar las deudas -más de 12.000 millones de pesetas- de los 78 clubes de Primera División, Segunda A y Segunda B, fase inicial que costará 20 millones de pesetas.

La Liga Profesional ha establecido unas primeras bases teóricas para el supuesto de que las negociaciones con la Administración lleguen a fructificar y se les conceda el aumento, del 1 al 5%, en el porcentaje de las quinielas, lo que aún llevará algún tiempo y, fundamentalmente, garantías firmes de control. La mala imagen, entre despilfarradora y caótica, según admiten incluso fuentes próximas a los clubes de fútbol, que se han ganado a pulso los directivos futbolísticos, es uno de los condicionantes básicos que se plantea la actual Administración.Siempre según fuentes del comité ejecutivo de los clubes profesionales -éste periódico no pudo dialogar, por segundo día consecutivo, con el ministro de Cultura, Javier Solana, ni con el secretario de Estado para el Deporte, Romá Cuyás-, el ministro Solana recalcó, en su reunión del pasado lunes con los directivos Vega-Arango y Antonio Baró, la necesidad del sometimiento de los clubes al control económico del dinero que reciban, lo que aceptaron éstos, aunque, al parecer, mantuvieron su negativa a entregar a instituciones públicas los negativos balances económicos que mantienen por su consideración de "entidades privadas". Por otra parte, en la noche del jueves, Romá Cuyás se entrevistó con Josep Lluís Núñez, presidente del Barcelona, para dialogar sobre el problema de las quinielas, según informa Efe.

En este sentido, las previsiones para la reunión de presidentes del próximo jueves son las de aceptar la oferta del ministro de ofrecer el caldendario liguero y formar una comisión mixta de estudio. Sobre la hipótesis de una supuesta concesión del 5%, una parte, el 3%, quedaría en el propio comité ejecutivo como "pagador" de las deudas, de forma porcentual y previa presentación de la auditoría correspondiente, con la premisa de "presentar todas las facturas a la propia Administración". El 2% restante, siempre bajo la perspectiva de trabajo del comité futbolístico, se repartiría entre los clubes, también con la salvedad de que "en ningún caso este dinero se destinaría para fichajes y sí para gastos corrientes o instalaciones".

Para llegar al fondo exacto de las deudas de los 78 clubes de Primera División, Segunda A y Segunda B, se va a encargar a una sociedad auditora que establezca las bases de la realidad contable en los clubes -caótica, en muchos casos-, y, tras el sondeo, elevar las normas de obligado cumplimiento contable para fijar con posterioridad las condiciones de pago que llevaría a efecto el propio comité. Esta primera fase costará unos 20 millones de pesetas.

Acuerdos concretos

Las perspectivas desde el fútbol profesional son las de intentar llegar a acuerdos concretos en el mes de diciembre, y "comenzar a percibir ya las nuevas cantidades a primeros de enero". En un plazo de cinco años se estima que se alcanzaría la denominada cota cero, aunque existe también un esbozo de intentar un adelanto del dinero que sirviera para hacer frente a la "enorme bola de nieve" que deben los clubes, a través de la gestión con un banco, o un grupo de ellos, con la garantía de las percepciones económicas de las quinielas, "con lo que el fútbol sólo pasaría a tener un acreedor".Con el 1% de las quinielas, el fútbol percibió la temporada anterior unos 660 millones de pesetas, aunque faltan por cobrar aún más de 30, correspondientes a las últimas tres jornadas del ejercicio pasado. De los 18.000 millones de pesetas que tiene de presupuesto el Consejo Superior de Deportes para el presente año, 14.000 provienen de las quinielas.

El fútbol ingresó, además, unos 1.250 millones de pesetas al sumarle otros conceptos, como los relativos a televisión.