Afectados por las inundaciones piden congelar la devolución de los créditos oficiales recibidos

Damnificados por las inundaciones de octubre de 1981 han acordado, durante una asamblea celebrada el pasado miércoles en Alzira (Valencia) a la que asistieron unas mil personas, convocar un cierre comercial, seguido de concentración, para el próximo día 20, en esa localidad, una de las poblaciones más afectadas por aquella catástrofe. La concentración tiene por finalidad reivindicar que se congele la amortización de los créditos oficiales para la reconstrucción de viviendas e industrias, así como pedir una agilización de las actuaciones judiciales sobre las posibles responsabilidades de la catástrofe.

Igualmente piden una equiparación con los damnificados por las inundaciones del verano de 1983 en el País Vasco. Estos últimos consiguieron la supresión del impuesto de lujo en los nuevos vehículos para reponer los destruidos y la eliminación de los aranceles en las máquinas de importación repuestas. Según manifestó ayer el presidente de la Asociación de Afectados por las Inundaciones de la Provincia de Valencia (AFIVA), Xavier Sierra, se debería congelar la amortización de los créditos -cuyos dos primeros años de carencia están a punto de concluir- hasta tanto haya un fallo judicial sobre las posibles responsabilidades de la Administración en la catástrofe.

La presa de Tous

A instancias de los afectados -unas 50.000 familias-, se instruyó un sumario sobre las causas que dieron lugar a que reventase la presa de Tous, que originó las subsiguientes inundaciones, y sus posibles consecuencias. El sumario está concluido y sólo queda que la Audiencia Territorial de Valencia fije la fecha de la vista oral. Según Sierra, es necesario congelar la amortización de los créditos, a la espera de que el fallo judicial fije las posibles indemnizaciones a los afectados. Éstos solicitan un total de 125.000 millones de pesetas por este concepto. Actualmente se encuentran procesados y en libertad provisional los ingenieros del Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo, Jesús González Marín y Salvador Madrigal. El primero, como responsable de¡ mantenimiento, y el segundo, como encargado de la construcción de la presa.