La escuela franquista

En relación con la recensión que de mi libro Nacionalcatolicismo y escuela. La socialización política del franquismo (1936-1951) hace el profesor Tusell en el suplemento de Libros de EL PAIS del domingo 23 de septiembre, considero necesario rectificar una serie de errores que desliza en su comentario:

1. Mi obra no estudia "la enseñanza en los años entre 1945 y 1951 ", sino, como se desprende de su título con toda claridad, entre 1936 y 1951.

2. El conocido debate mentalidad versus ideología en la configuración del franquismo está contenido, documentado y discutido en mi libro con argumentos científicos. Mi extrañeza fue mayúscula al comprobar que Tusell despacha alegremente en dos' líneas de periódico un debate todavía no resuelto, como él sabe, por los mismos historiadores y politólogos, y al que mi libro dedica específica mente todo un largo capítulo.

3. Que la ideología del "nacional-catolicismo" fuese simple, esquemática, o que no calara en la población, etcétera, no es argumento para sostener que no era ideología. Todo dependerá del concepto que de la misma se adopte, y, sobre todo, de la función que cumplió. Lo único que confirmaría el juicio de Tusell es, en todo caso, la incapacidad del régimen para articular una ideología coherente, sistemática y atractiva.

4. Refiriéndose también al libro de Chueca, Tusell dice que "nos quedamos sin saber la historia política, en términos estrictos, del franquismo". El título de mi libro, como el de Chueca, demuestra bien a las claras que mi interés no consistía en escribir tal historia (plumas mejores lo han hecho), sino abordar monográficamente un aspecto de la misma en un período concreto. Si hubiese querido otra cosa, el libro se hubiera llamado simplemente El régimen de Franco, o similar.

5. El debate político interno en el seno del régimen, especialmente entre Falange e Iglesia, está ampliamente tratado y documentado en mi libro, al contrario de lo que parece sostener Tusell. Baste indicar, como ejemplo, que un capítulo se denomina Planteamiento general del conflicto Falange-Iglesia por el control del aparato educativo, planteamiento del cual el resto del libro viene a ser su desarrollo. Se puede comprobar con sólo ojearlo.-