En Lugo cerraron los colegios y en Vigo se suspendieron las fiestas

Diversos sectores de la provincia de Lugo paralizaron sus actividades desde primeras horas de la tarde de ayer tras ser declarado el estado de alerta en previsión del paso del ciclón Hortensia. Los colegios cerraron a mediodía. En Vigo (Pontevedra) se suspendieron la fiestas de San Froilán. Los servicios de Protección Civil alertaron a la población durante toda la mañana a través de las emisoras de radio, lo que motivó que en algunos lugares, sobre todo en la franja costera, cundiese la preocupación e incluso la alarma. El Gobierno Civil de la provincia declaró el estado de alerta en Lugo a partir de las ocho de la mañana, permaneciendo en contacto con los fuerzas de seguridad, centros hospitalarios, Cruz Roja y radioaficionados, por si fuese necesaria su colaboración en el curso del fuerte temporal de lluvia y viento que ha localizado el servicio meteorológico, que se cree alcanzará mayor virulencia entre las diez y las doce de la noche.

Pese a que según informó el gobernador civil de la provincia en funciones, Tomás Subirán, a este periódico "nosotros no hemos tomado ninguna determinación respecto a los centros de enseñanza", la delegación provincial de Educación, al tener conocimiento de la situación, recomendó a todos los centros la suspensión de sus actividades docentes durante la tarde, por lo que los colegios fueron cerrados a mediodía, adelantándose los transportes escolares para mayor seguridad de los alumnos. En muchos casos, y antes de que se adoptasen estas medidas, los padres optaron por recoger a sus hijos a las puertas de los colegios.

De igual forma fueron alertadas las cofradías de pescadores, juntas de puertos y comandancias de Marina, que enviaron mensajes a los barcos pesqueros que se encontraban faenando para que, regresasen inmediatamente a sus puertos de origen. La mayoría lo había realizado a media tarde. Los que permanecían atracados reforzaron las amarras.

En algunos ayuntamientos lucenses los vecinos fueron informados por medio de equipos de megafonía, que recorrieron las villas y los núcleos de la zona rural alertando a la población para que no abandonase sus domicilios y adoptase medidas de precaución y protección. También en varios ayuntamientos quedaron establecidos de forma permanente retenes de urgencia. Muchos comerciantes e industriales optaron por cerrar sus establecimientos durante toda la tarde. El Ayuntamiento de Vigo tomó la medida de suspender el desarrollo del programa de las fiestas patronales de San Froilán, que se vienen celebrando en la ciudad, y revisar la situación de las atracciones festeras, ordenando desmontar algunos tramos del recinto ferial que pudiesen resultar peligrosos.