_
_
_
_

El ejecutivo secuestrado por los GRAPO firmó el talón para el rescate en su coche

Rafael Villaseca Marco, director general de la sociedad Túnel del Cadí, secuestrado el pasado día 26 por los Grupos de Resistencia Antifascista Primero de Octubre (GRAPO) tuvo que extender el talón bancario por los cinco millones de pesetas que le exigían como rescate en el interior de su coche, estacionado en plena calle ante el empleado que, siguiendo sus órdenes, le había traído el talonario y en presencia de los dos secuestradores.

A instancias de los dos grapo, y siguiendo sus directrices, Villaseca se puso en contacto con su despacho para pedir a un empleado que le trajera el talonario de cheques de la empresa que el director general tiene a su disposición, y que no llevaba encima. El punto de cita fue fijado por los activistas: el encuentro se produjo en la calle, a bordo del mismo coche de Villaseca en la zona del barrio barcelonés de Sarrià. El empleado no sospechó de la presencia de un hombre y una mujer -los dos integrantes del comando- junto a Villaseca. Los mismos grapo le revelaron, la situación, le advirtieron del peligro que corría la vida del secuestrado y le instruyeron, sobre el modo de hacer efectivo el rescate. Los terroristas trazaron el siguiente plan: el empleado debía dirigirse a la entidad bancaria escogida, cobrar el talón y acudir a un punto determinado dado por los secuestradores. Allí le esperaría la mujer que formaba parte del comando, a quien daría el dinero. Fue alertado de que más miembros de la organización terrorista le seguirían a distancia para controlar sus movimientos. Se le amenazó con su muerte inmediata y con la posterior de Villaseca si, a la hora fijada, la mujer no se reunía con el segundo, secuestrador que permanecería junto al director general en otra parte de la ciudad.

El empleado se dirigió hacia el banco y Villaseca y el grapo comenzaron su paseo por el barrio de Sarrià, en dirección a Pedralbes, punto de encuentro final fijado por los dos activistas. Tras cobrar el dinero sin dificultades, lo entregó a la mujer, del comando, quien se reunió con su compañero, con lo que el industrial barcelonés quedó en libertad.

Villena y el empleado fueron las dos únicas personas que participaron en las gestiones para facilitar el pago del rescate. Ningún otro miembro de la empresa concesionaria de las obras del túnel del Cadí tuvo conocimiento del secuestro.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_