Un Tesoro para regular el precio del dinero

Los pagarés del Tesoro se han convertido en una referencia obligada para el resto de los activos y su evolución hasta final de año marcará el rumbo que deberán tomar las retribuciones de los demás emisores.Así, una de las'consecuencias del pacto para reducir el coste del dinero es el descenso en la retribución de estos pagarés. Por eso, a principios de 1984, en las subastas de títulos a un año, se fijó un -15,54% de tipo de interés medio, mientras que en la subasta celebrada el pasado jueves se fijó el 13,464%. En los títulos a seis meses, el descenso ha sido del 14,80% al 8,49% actual.

Los expertos monetarios prevén que en las próximas subastas -dos emisiones mensuales hasta final de año- continúe este descenso de los tipos para situarse, a principios de 1985, en torno al 12%. De todas formas, continúan siendo muy atractivos, ya que no se puede olvidar la existencia de un mercado secundario muy activo, que confiere á estos activos una elevada liquidez.

Igual merma en la retribución (en torno al 1 %) se prevé para otras ofertas previstas por el Tesoro, que incluyen, hasta final de año, una emisión de bonos -el próximo 10 de diciembre- para las que aún no se tia fijado el tipo de interés. La últirna emisión, realizada en junio, situó éste en el 15,75%. Hay que recordar que, estos bonos se amortizan en un plazo de tres a cuatro años y que no desgravan.

También hay prevista una nueva emisión de obligaciones del Estado, el 3 de diciembre, aún sin determinar su tipo de interés, aunque quizás repita el 16% de -la emisión del pasado mes de agosto. Puede que el Banco de España adquiera un importante paquete de estos títulos para inyectar liquidez en el mercado secundario.

Estos títulos, además, se colocan en dos fases, con una primera subasta que fija el tipo medio de interés, y aceptación posterior de suscripciones a dicho tipo en una segunda fase.

Finalmente, la deuda desgravable tiene pendiente una nueva emisión en el último trimestre, concretamente el 20 de diciembre, para la que tampoco se ha fijado el tipo de interés. La emisión realizada a finales del primer semestre se situó en el 13,50%. Estos títulos, a diferencia de los anteriores, permiten acogerse a la desgravación fiscal.

Las fechas concretas, de estas emisiones, por otra parte, deberán ser fijadas por Hacienda que, además, tiene la posibilidad de fraccionarlas.