Gobierno, patronal y UGT intentan concretar este fin de semana la parte menos coflictiva del pacto
MadridEn los contactos y reuniones confidenciales que mantienen desde el pasado viernes los negociadores del Acuerdo Económico y Social 1984-1985, el Gobierno, la patronal y UGT intentan concretar los temas más fáciles o urgentes, según las escasas impresiones que han trascendido y no han podido ser confirmadas en fuentes de las partes. Quieren presentar sus primeras decisiones el martes próximo a la mesa general y urgir así la respuesta a CC OO, decidida a mantener su presencia. Los asuntos sin principio de acuerdo quedarán también para la negociación formal y pública, con la posibilidad de que algunos pasen al desarrollo posterior del pacto. Entre tanto, CC OO, que califica estas conversaciones de "clandestinas", pidió que se reemprenda la negociación de forma natural" antes del martes y que haya un debate público sobre la misma en TVE. Tras la reunión que celebró ayer por la mañana el secretariado permanente de CC OO para analizar su estrategia, este sindicato dio a conocer las decisiones de pedir un debate por TVE y una negociación previa al martes y "de forma natural y pública", que ponga fin a las conversaciones "clandestinas" del Gobierno, la CEOE y UGT.
Los portavoces de CC OO coincidieron en declarar que el acuerdo pretendido por las otras partes no podrá crear empleo ni es de recibo para ellos. También dijeron que continuarán en la mesa formal y que no han sido invitados por los otros a contacto alguno para el fin de semana. Marcelino Camacho precisó que puede suponer, además, una pérdida de tres puntos en el poder adquisitivo.
Según Antonio Gutiérrez, los problemas de método de negociación -esgrimido por el Gobierno, la CEOE y UGT como muestra de que CC OO carece de voluntad de avanzar hacia la firma- "tienen solución si hay voluntad de hacer un acuerdo que genere empleo". Pero añadió que "Boyer y Cuevas se han cargado otra vez, como el año pasado, toda posibilidad de acuerdo, pues el último Consejo de Ministros, al bajar a la vez el gasto público, el déficit y la presión fiscal, ha demostrado la voluntad de mantener su política económica, que coloca a los sindicatos en situación de debilidad".
Reuniones
Los contactos y reuniones bilaterales o trilaterales sin CC OO, según fuentes gubernamentales, empezaron el viernes y dejarán para la mesa general del martes los asuntos en los que no haya acuerdos. Junto a los puntos en los que a las partes les interesa forzar posiciones hasta el último momento, como subida salarial y cotizaciones a la Seguridad Social, en este apartado aparecerán probablemente la reforma del mercado de trabajo, política fiscal, reformas de la Seguridad Social y de la empresa pública, y participación institucional (incluye reparto del patrimonio sindical). En la mayoría de estos temas ni siquiera tiene planes concretos- el Gobierno.
Lo menos conflictivo
Para los asuntos menos conflictivos (inversión y oferta pública de empleo, medidas de fomento a la inversión privada, garantía de revisión de las pensiones en función de la inflación prevista, fondo de solidaridad, marco macroeconómico y aumento de las disponibilidades financieras para el sector privado), los negociadores intentarán llegar a la mesa general del martes con pactos incluso por escrito. El objetivo sería presionar así a CC OO para que se pronuncie sobre cada tema antes de pasar al resto. Esta estrategia se registró ya el pasado jueves; el Gobierno, la patronal y UGT preguntaron varias veces a CC OO si el no aceptar la exclusión de cada uno de los puntos que no prosperó en la mesa significaría su negativa a discutir o firmar el acuerdo, y la respuesta fue siempre "nos quedamos".
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