Iberduero construirá varias centrales hidroeléctricas en La Rioja

Iberduero se ha comprometido con el Gobierno autónomo de La Rioja a paliar en parte la actual situación deficitaria desde el punto de vista de producción energética que padece esta región y que, según el consejero de Industria, no tiene ninguna razón de ser. Andrés Verascoechea, director de Electra de Logroño, empresa filial de Iberduero que controla la distribución eléctrica de La Rioja, ha señalado que su compañía va a invertir en los próximos años más de 16.000 millones de pesetas en la construcción de varias centrales hidroeléctricas en el Ebro y sus afluentes a su paso por La Rioja.El proyecto más adelantado es el de la central de Bobadilla, en la cuenca del río Najerilla, que podría entrar en funcionamiento para el otoño del próximo año. Se está tramitando además la ampliación de las centrales ya existentes en Panzares y El Cortijo así como la construcción de otras cinco en la cuenca alta del Ebro, antes de llegar a Logroño, a su paso por Briñas, Briones, San Asensio, Elciego y Laguardia.

Los anteriores proyectos junto a un trasvase de aguas en la cuenca alta del río Najerilla, desde el pantano de Mansilla hasta la localidad de Ventrosa, suponen un aumento potencial de la producción eléctrica de 280 millones de kilovatios-hora, con lo que se triplica la actual producción.

Dependencia energética

Para el consejero riojano de industria, Emilio Pérez, la actual dependencia regional del sistema eléctrico de La Rioja (se producen 130 millones de kilovatios-hora frente a los 550 que se consumen) no tiene ningún sentido, ya que, si se calcula teóricamente, el máximo aprovechamiento energético de los ríos riojanos permitiría una producción cinco veces superior al actual consumo.Emilio Pérez ha señalado también que hace 15 años la producción de energía hidroeléctrica en La Rioja era similar a la actual, aunque representaba el 60% del consumo, mientras que ahora este porcentaje apenas supera el 20%. El consejero riojano se mostró confiado en que, una vez abandonado el proyecto nuclear de Lemóniz, la empresa Iberduero lleve a cabo toda una serie de proyectos hidroeléctricos pendientes en la región.