¿Dónde se gasta nuestro dinero?

Un servidor fue uno de los muchos españoles que confiamos en que el PSOE trataría por todos los medios de poner coto a las muchas arbitrariedades heredadas tanto del inmediato pasado como del más lejano, pero desilusionados comprobamos, a tenor de los hechos consumados, que, o no se pone toda la carne en el asador, o no se dispone de personal suficiente con energía, honradez y ganas de cooperar en todos los niveles de la política, correspondiente a la actuación de la Administración central, autonómica o municipal, para corregir esos vicios, tanto de fondo como de forma, que sirviendo a intereses concretos y muy particulares perjudican a la inmensa mayoría de los ciudadanos.Desde los diferentes medios de comunicación social se nos bombardea con que estamos en crisis, que hay que apretarnos el cinturón, que hay que aumentar los impuestos y, sobre todo, y esto lo destacamos, que hay que reducir gastos. Pues bien, si un solo botón puede servirnos de muestra de la mercancía que se nos pretende vender, vamos al siguiente:

Las cocheras y talleres del Metro sitas en Canillejas se encuentran a una distancia de la estación del mismo nombre de unos 300 metros, que no hay que salvar por descampados, sino por calles perfectamente pavimentadas y alumbradas. Sin embargo, a pesar de esa distancia, tan pequeña como cómoda de recorrer, han puesto, suponemos que para servicio exclusivo de los empleados del Metro, el autocar de unas 50 plazas matrícula M-5419-CS, que de día y de noche está haciendo ese único itinerario en ambas direcciones ida y vuelta, yendo la mayor parte de los viajes el conductor y uno o ningún empleado.

Este gasto superfluo, injustificable, que causa en el barrio tanta sorpresa como indignación, ¿forma parte de las causas (que generan esos déficit que hemos de enjugar todos los ciudadanos y que servirán de motivo para aumentar las tarifas y otros impuestos?

No, señores gobernantes, tenemos que decirles que así no se reducen gastos. ¿Cuánto cuesta a los ciudadanos ese autocar entre gastos de amortización, combustible, conservación, etcétera? ¿No les parece un desafío a los contribuyentes tenerle circulando tantas horas prácticamente vacío y para cubrir un recorrido tan ridículo? ¿Qué español no tiene que andar distancias superiores para ir a su trabajo? /