La revista 'Litoral' recopila la obra periodística de José Bergamín

La revista Litoral ha iniciado la publicación de una antología periodística de la obra de José Bergamín, a la que dedicará tres números monográficos, con los que pretende resaltar la importancia de la amplísima obra en prensa de este escritor, que publicó más de 600 artículos. La relación de Litoral con Bergamín fue siempre estrecha, desde que Prados y Altolaguirre fundaran la revista en 1926 y a partir de 1968, cuando la resucitó su actual editor, José María Amado y Arniches. Esta relación se prolongó hasta la muerte del escritor, ocurrida el 28 de agosto de 1983 en San Sebastián.La antología se divide en tres números -ya ha aparecido uno y los otros lo harán en septiembre-, con un enfoque temático, "para poder ofrecer así las principales coordenadas del pensamiento bergaminiano", escribe Penalva en la introducción a la antología, que titula El pensamiento de un esqueleto.

El primer número tiene cinco apartados principales: primeros escritos, Bergamín y el grupo literario del veintisiete, crítica literaria y el arte de birlibirloque. El segundo número estará dedicado a temas políticos, excepto la etapa final en los periódicos Egin y Punto y Hora, el tercero, dedicado a la religión y temas varios. Cada apartado va precedido de un breve comentario de Penalva en el que justifica su estructura y sitúa el tema dentro de la obra bergaminiana.

Bergamín escribió en Litoral desde que apareciera la revista, en noviembre de 1926, y volvió a colaborar en la mayoría de los números a partir de 1968, año en que la revista vuelve a aparecer con José María Amado como editor. Éste y Bergamín mantenían relaciones desde la infancia, motivadas por los lazos familiares que les unían.

Bergamín entregó a Litoral, en exclusiva, La claridad desierta, lo primero que se publica de la trilogía Velado desvelo y Apartada orilla. Prácticamente todos los veranos, hasta que fijó su residencia en el País Vasco, Bergamín pasaba una semana en Fuengirola, en casa de Amado, donde mantenían largas conversaciones. "Bergamín era el personaje incómodo, siempre a cuestas con la verdad que no se quiere oír, siempre limpiando la broza y poniendo al desnudo tantos importantes sentimientos que se quieren tapar".

"Escayolado académico"

Con esta recopilación de una parte de los artículos escritos por Bergamín Litoral quiere resaltar "la importancia que tuvo desde el principio de su vida y a lo largo de toda su obra este quehacer periodístico". El propio Bergamín lo expresa con contundencia en su artículo El sentido periodístico, publicado en El Nacional de Montevideo en abril de 1960: "El escritor que tiene sentido del tiempo, del tiempo que vive y del tiempo en que vive (esto es, del tiempo suyo y del tiempo de los demás; del tiempo de todos y de su tiempo propio), es entonces y por tenerlo, en estricta aplicación del vocablo, periodista, un periodista". Y termina el artículo así: "El escritor que elude de su obra ese sentido periodístico por completo se córivierte en escayolado académico, hueco, vacío (como tantos lo son); en escritor sin tiempo, sin alma, sin vida, sin verdad".