Retolaza afirma que la Guardia Civil y la policía autónoma vasca convivirán sin problemas

Luis María Retolaza, consejero de Interior del Gobierno vasco, ha declarado que "la convivencia entre la Guardia Civil y la policía autónoma vasca (Ertzaina), en aquellas zonas en las que ambos cuerpos coincidan, no resultará problemática, sino todo lo contrario, ya que el Estatuto de autonomía delimita claramente las correspondientes competencias".

El responsable de seguridad del Ejecutivo vasco anunció que el plan de despliegue de la Ertzaina se realizará a principios del próximo mes de septiembre. A partir de esa fecha, más de 400 policías autonómicos se instalarán en las nuevas comisarías de las localidades guipuzcoanas de Beasain, Bergara y Mondragón, y la vizcaína de Durango, para hacerse cargo de los servicios de orden público y seguridad ciudadana.El plan de despliegue, elaborado por los responsables de seguridad del Gobierno vasco, prevé que el cuerpo de la Ertzaina, que contará con 6.300 funcionarios en 1987, cumpla los servicios de seguridad ciudadana y de orden público en toda la comunidad autónoma vasca. La Junta de Seguridad aprobó la aplicación parcial de ese proyecto el 1 de diciembre del pasado año, pero, según reconoció ayer Luis María Retolaza, no podrá ponerse en funcionamiento hasta principios de septiembre, a pesar de que algunos medios de información apuntaban el pasado viernes como la fecha señalada.

La Ertzaina cuenta actualmente con 1.600 miembros (otros 600 finalizarán el período de preparación el próximo mes de diciembre), que están cumpliendo servicios de tráfico y custodia de instituciones. A partir del próximo mes de septiembre, 637 agentes de esa plantilla formarán parte del plan de despliegue, que prevé la creación de una brigada móvil, integrada por 100 policías; la puesta en funcionamiento de cuatro comisarías (Durango, Beasain, Bergara y Mondragón) y la creación de puestos de guardia.

El plan de despliegue establece que la policía autónoma, que generalmente patrullará a pie en los núcleos urbanos, no debe estar reclutada en cuarteles. "Intentaremos evitar la concentración de los policías en condiciones de alejamiento de la población, porque creemos que es contraproducente", aseguran los responsables de seguridad del Gobierno vasco.

Así, los policías vivirán en sus casas, desde donde se desplazarán a realizar su trabajo. Los únicos edificios en los que trabajarán los agentes serán las nuevas comisarías, que se ubicarán en locales comprados o rehabilitados por el Gobierno vasco. Está previsto, sin embargo, que la brigada móvil esté acuartelada durante el tiempo que duren las situaciones conflictivas que los agentes deberán atender de modo excepcional. De las cuatro localidades en las que comenzarán a funcionar las nuevas comisarías de la policía vasca, al menos dos (Beasain y Durango) cuentan con cuarteles de la Guardia Civil.

En opinión del consejero de Interior del Gobierno vasco, "se dará la convivencia lógica entre dos cuerpos que están ubicados en la misma zona, pero no debe existir problema alguno. Durante las inundaciones que asolaron al País Vasco ya se demostró el trato cordial y de cooperación que todos mantuvimos".

Según establece el Estatuto de autonomía del País Vasco la policía autónoma se hará cargo del mantenimiento del orden público dentro del territorio de la comunidad, así como la protección de personas y bienes.