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La presión francesa sobre ETA

El Gobierno francés deporta a la República Dominicana a Eugenio Echeveste, el 'número dos' de ETA Militar

El Gobierno francés deportó en la noche del pasado miércoles a la República Dominicana al número dos de ETA Militar, Eugenio Echeveste, Antxon, considerado el hombre que más influencia ha ejercido sobre la organización terrorista en los últimos dos años. Antxon, que fue detenido por la policía francesa el pasado 30 de julio, fue confinado previamente en Metz, en el departamento de La Moselle, en el noreste de Francia. La expulsión de Echeveste, que no figuraba entre la documentación de los 95 etarras que el Gobierno español entregó a la Interpol para que sean buscados y detenidos, es la más importante de las 24 realizadas hasta ahora por el Gobierno francés.

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Echeveste llegó por vía aérea a Santo Domingo, capital de la República Dominicana, a las cinco de la tarde (hora peninsular), en un vuelo regular de París a Caracas, con escala en Santo Domingo, según fuentes oficiosas francesas. Hasta que Antxon no llegó a ese país centroamericano, las autoridades francesas no difundieron la noticia de la expulsión. El Gobierno español había sido informado previamente, pero tampoco en España trascendió la noticia hasta horas después de que el dirigente etarra había iniciado el viaje hacia el Caribe.La detención de Echeveste se produjo hace 11 días, en la localidad francesa de Anglet, situada entre Bayona y Biarritz. Antxon, que se identificó inmediatamente a la policía, fue localizado cuando viajaba en un Renault 5, en un control policial de las Compañías Republicanas de Seguridad (CRS). Junto con él iba el también presunto miembro de ETA Militar Alfonso Etxegaray Achirica.

Este último fue puesto en libertad poco después, pero Antxon quedó confinado a la ciudad de Metz, capital del departamento de La Moselle, próximo a la frontera franco-germana.

Sigilo sobre su paradero

En esta ciudad francesa, Antxon ha estado vigilado por siete inspectores. A raíz de la detención, su abogada, Christine Fando, presentó una denuncia por detención ilegal del dirigente de ETA.

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Mientras ha durado su confinamiento, tanto el lugar exacto donde se encontraba como el país al que podía ser expulsado han permanecido guardados en secreto por las autoridades francesas. Según algunos medios de comunicación, Antxon llegó a ser identificado días atrás en Metz por un periodista francés, motivo por el que la policía francesa decidió inmediatamente cambiar su lugar de residencia forzosa,

Al parecer, Antxon no se sometía a los preceptivos controles administrativos ni renovaba su permiso de residencia en Francia desde 1980. Ese año fue detenido por la policía francesa en un control, y juzgado por tenencia ilícita de armas.

Condenado por este motivo a tres meses de prisión, posteriormente fue confinado en Angers, de donde la policía francesa perdió la pista de su paradero, hasta que le detuvo en Anglet el pasado 30 de julio.

Hasta ahora, las expulsiones de Francia se habían limitado a dirigentes históricos de ETA con escasa influencia en la organización o a terroristas de poco peso específico en las decisiones del grupo terrorista. La expulsión de Antxon, sin embargo, ha sido la primera decretada contra un importante y destacado dirigente de ETA, ya que a Eugenio Echeveste se le atribuye la máxima responsabilidad en la estrategia adoptada en los últimos años por la organización terrorista.

Reservado e introvertido, de él se asegura que nunca ha participado personalmente en atentados terroristas. Nació en San Sebastián, en 1951, y estudió en un colegio de los jesuitas. En 1975 se incorporó a ETA Político-militar, junto con José Miguel Apalategui, Apala. Ambos se escindieron de la organización en mayo de 1977 y se integraron en ETA Militar.

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