La oposición nicaragüense condiciona su presencia electoral al diálogo político con los sandinistas

La oposición nicaragüense anunció oficialmente el viernes que no participará en las elecciones, previstas para el próximo 4 de noviembre si el Gobierno sandinista de Managua no acepta antes del 25 de julio -fecha límite para la entrega de las candidaturas- su proposición de diálogo nacional hecha en el pasado mes de diciembre.

Coordinación Democrática, principal alianza de oposición al régimen sandinista, precisó que si sus exigencias resultaban satisfechas, su candidato presidencial será Arturo Cruz, ex miembro de la Junta de Gobierno sandinista, ex embajador nicaragüense en Washington y actualmente residente en Estados Unidos. Como candidato a la vicepresidencia, la plataforma opositora propondrá al socialcristiano Adán Fletes.El grupo Coordinación Democrática integra al Partido Socialdemócrata, al Partido Socialcristiano y al Liberal Constitucional, así como al Consejo Superior de la Empresa Privada y dos centrales sindicales.

Luis Rivas, presidente de esta coalición, mantiene sus exigencias políticas, formuladas el pasado diciembre, para que el "proceso electoral sea libre y democrático": independencia del Gobierno respecto al partido, derogación de las leyes que vulneran los derechos del hombre, suspensión del estado de urgencia, adopción de una ley de amnistía, respeto de las libertades sindicales y de culto, autonomía del poder judicial y entrada en vigor del hábeas corpus.

Según esta plataforma política, un diálogo sobre estos aspectos habrá de establecer las condiciones de una amnistía general que alcance a los grupos armados que luchan contra el régimen sandinista. Luis Rivas precisó, sin embargo, que este punto podrá ser objeto de negociación.

Los partidos políticos de oposición esperan que el Gobierno anuncie el levantamiento del estado de urgencia, en vigor desde marzo de 1982, con ocasión del quinto aniversario del triunfo de la revolución sandinista, el pasado miércoles, y antes del inicio de la campaña electoral que deberá abrirse en el mes de agosto.

Daniel Ortega, coordinador de la Junta de Gobierno nicaragüense, anunció el jueves pasado la prórroga hasta el próximo 20 de octubre del estado de urgencia y añadió que "no será levantado en tanto el imperialismo norteamericano no cese sus agresiones" contra Nicaragua.

El estado de urgencia reduce notablemente las actividades de los grupos políticos e impone la censura previa en los medios de información. Daniel Ortega indicó también que los partidos políticos contarán con autorización para organizar mítines públicos durante la campaña electoral.