Los bancos de semen de España han 'creado' un millar de niños

Los tres bancos de semen que existen en España han creado aproximadamente un millar de niños desde que comenzaron a funcionar en 1978, según especialistas relacionados con estos centros. Los bancos de semen, última esperanza de los matrimonios con infertilidad masculina, se nutren sobre todo de las donaciones de estudiantes de Medicina, que reciben a cambio unas 2.000 pesetas.En España funcionan centros de este tipo, uno en la residencia bilbaína de Cruces, y los otros dos, que son privados, en Madrid y Barcelona. Además, están avanzados los proyectos de creación de otros centros en Córdoba y Valencia. El banco de semen de Cruces, único del que tiene datos el Ministerio de Sanidad, ha registrado unos 300 nacimientos desde que empezó a funcionar en noviembre de 1978. Estos centros se rigen por normas estrictas que pretenden controlar, entre otras cosas, la buena salud de los donantes.

Los bebés nacidos gracias a un banco de semen son muy difíciles de controlar por el donante en el ámbito administrativo, porque en el Registro Civil, al igual que en el resto del mundo, son inscritos como hijos de su padre legal. El proceso cuesta poco dinero y se procura elegir a un donante con las características físicas -color de pelo, ojos y estatura- del padre, según explicaciones de uno de los médicos que realiza estas fertilizaciones artificiales.

El dinero simbólico que reciben los que entregan el semen se ve a veces incrementado por un donativo de las propias pacientes, según las mismas fuentes médicas. Generalmente, la mujer recibe el semen de un solo donante, aunque algunos grupos católicos han sugerido que la única oportunidad de que el Vaticano acepte este tipo de fertilización sería mezclar diferentes donaciones, con el objeto de dificultar la identificación del padre.