El 'show' de la convención llega a San Francisco

ENVIADO ESPECIAL Cuando la ciudad de San Francisco fue designada para ser la sede de la Convención Nacional del Partido Demócrata, los ciudadanos de la más bella e incondicional de las urbes estadounidense se prepararon para vivir uno de los espectáculos o festivales más coloreados de la vida norteamericana, tanto en lo político como en lo social.

San Francisco recibe este fin de semana a unos 25.000 visitantes, a los que honrará haciendo gala de su tradicional inconformismo. Junto a los delegados políticos del Partido Demócrata -que nombrarán al líder presidencial de su partido- habrá múltiples manifestaciones del más variado signo: desde los antinucleares y pacifistas, reunidos en una contraconvención, hasta los 100.000 participantes en la célebre parade de gays y lesbianas que han encontrado su paraíso en la ciudad de las colinas, donde la amenaza divina promete nuevos y tumultuosos terremotos.

Pero San Francisco será, ante todo, el foro de donde deberá salir el hombre de los demócratas -Walter Mondale- encargado de la difícil misión de recuperar la Casa Blanca para los demócratas.

Cinco días de debate político

En el subsuelo del Moscone Center -punto de reunión de la convención-, cuyo nombre honra la memoria del alcalde de San Francisco que en 1978 fue asesinado por el concejal Dan White, unas 10.000 personas asistirán, en la noche del lunes, a la inauguración de la convención. No faltará ninguno de los grandes del Partido Demócrata, incluido el ex presidente James Carter, cuya pública aparición en la tribuna será breve. Los demócratas no desean recordar la impresionante derrota que sufrió Carter, el 4 de noviembre de 1980, ante el actual presidente de Estados Unidos, el republicano Ronald Reagan.Mario Cuorno, el prestigioso gobernador del Estado de Nueva York, abrirá la convención con un discurso que marcará el tono de la reunión: unidad de todo el Partido Demócrata para intentar ganar a Ronald Reagan en la elección presidencíal del 6 de noviembre próximo.

En la jornada del martes, la convención discutirá, a partir de los diferentes comités, la plataforma política -o programa electoral- que los demócratas ofrecerán al elector norteamericano como alternativa a la actual Administración republicana. El cuerpo de la plataforma está compuesto por propuestas para la congelación de armamentos, negociaciones con la URSS, soluciones políticas para Centroamérica, reducción del gasto público y defensa de la igualdad de derechos entre el hombre y la mujer.

El plato fuerte de la jornada del martes será la intervención de Jesse Jackson, con seguros ataques contra la política de Reagan, tanto en relaciones exteriores como en política interior, junto a la petición de Jackson de una serie de principios que tengan en cuenta los derechos de las minorías en la campafía electoral y eventual administración de Walter Mondale.

Para el miércoles, la convención llegará a su punto máximo, con la aparición de las vedettes del partido: desde el senador Edward Kennedy -que fracasó en su intento de ser el candidato en la convención demócrata de 1980, en Nueva York, ante el presidente Carter- hasta el aspirante Gary Hart, para concluir, sin sorpresas, con la votación de la mayoría de delegados a favor de Walter Mondale, que cuenta con una confortable mayoría de 2.075 delegados, siendo 1.967 los necesarios para ganar el nombramiento.

El senador por Colorado Gary Hart presentará batalla hasta el último minuto, manteniendo su teoría -que el tiempo podría demostrar- de que Walter Mondale no es el hombre idóneo para ganar a Ronald Reagan. Los norteamericanos, según Hart, prefieren líderes con "nuevas ideas".

Disciplina de partido

Pero Gary Hart deberá doblegarse a la disciplina de partido y aceptar el voto mayoritario de los 3.933 delegados a favor de Walter Mondale, que, coronado líder de los demócratas, pronunciará su primer discurso de presidenciable ante el foro de las 10.000 personas agrupadas en el Moscone Center, entre delegados, observadores, diplomáticos y periodistas.Las grandes cadenas de la televisión norteamericana retransmitirán los principales momentos de la convención, llevando el clima preelectoral demócrata hasta los hogares de unos 70 millones de telespectadores-electores.

Quedará para la jornada del jueves el anuncio oficial por parte de Walter Mondale de Geraldine Ferraro como candidata a la vicepresidencia de Estados Unidos. Ferraro, de 48 años de edad, cuen ta con larga experiencia política como miembro, por el estado de Nueva York, de la Cámara de representantes norteamericana.

Con la elección de Ferraro, Mondale intenta captar la mayor parte del electorado femenino norteamericano, que supone el 53% del censo electoral de EE UU y que puede ser clave para inclinar la balanza, el próximo mes de noviembre, en favor de la reelección del actual presidente, Ronald Reagan, o de la llegada al poder del equipo formado por Mondale y Ferraro.