Numerosas industrias y comercios de Gijón cerraron sus puertas en solidaridad con la convocatoria

En Gijón, la jornada de protesta se inicio con una huelga general que comenzó a la una de la tarde, con el cierre de comercios y establecimientos hosteleros, el cese de actividades en la mayor parte de las industrias y la paralización del transporte público. No se registraron más incidentes de importancia que la rotura de las lunas de los escaparates de los almacenes Simago, que no habían cerrado sus puertas al público. Durante la mañana, el paro no fue muy generalizado en el sector del metal, ya que en Ensidesa se trabajó con normalidad.La huelga de media jornada convocada ayer en Gijón por CC OO, USO, Corriente Sindical de Izquierda y las dos ramas de la CNT en contra del decreto de reconversión naval culminó con una manifestación multitudinaria, que partió a las 18.30 horas de la plaza del Humedal y finalizó al filo de las ocho de la tarde en la zona de Campo Valdés, en las inmediaciones del ayuntamiento. Según los sindicatos convocantes de esta acción de protesta -que contó con la oposición expresa de UGT, PSOE y Alianza Popular-, participaron en la manifestación unos 80.000 trabajadores, mientras que la Jefatura Superior de Policía cifraba la asistencia en sólo 8.000. A lo largo de la jornada hubo un gran despliegue policial en toda la ciudad, que fue criticado, al término de la manifestación, por Francisco Javier Suárez, secretarijo general del Partido Comunista de Asturias, único partido que apoyó el paro de ayer.

En un comunicado conjunto leído al término de la manifestacion se hicieron duras críticas a los Gobiernos español y asturiano y al alcalde de Gijón, el socialista José Manuel Palacio. Este último había pedido que no se ejercieran acciones violentas durante la jornada en un bando que hizo público el martes pasado.

Según los sindicatos, la aplicación del decreto de reconversión naval en la bahía gijonesa, que cuenta con tres astilleros privados y uno público, supondría la pérdida de 2.000 puestos de trabajo directos y otros 2.000 inducidos.