Y, sin embargo, se mueve
El próximo gobernador del Banco de España anunció que si continúan las condiciones económicas actuales, descenderán los tipos de interés (bueno, ya se prevén algunas medidas concretas para echar una mano). Y, como en un milagro, la bolsa se desperezó de su letargo y se puso a caminar, bien es cierto que sin saber realmente hacia donde. Pero, después del tedio de las pasadas jornadas, la subida del índice general en 76 centésimas puede ser calificada corno una pequeña proeza.Poco importó a los inversores analizar someramente cómo se efectuará ese recorte a la retribución del dinero, justo en unos momentos en que el tipo de interés preferencial de la banca norteamericana (prime rate) continúa subiendo, y mientras que el dólar goza de una salud a prueba de déficit comercial.
En todo caso, los intereses que el Tesoro está ofreciendo a los inversores de pagarés descienden de subasta a subasta, tal y como estaba previsto y pactado entre Economía y la gran banca. Ésa es una realidad que debe empujar a los ahorradores hacia la renta variable cada vez más. Pero tampoco existen tantas esperanzas .como para echar a volar las campanas.
Eléctricas, químicas y bancos registran buenas expectativas, así como Telefónica, que ayer estaba -según decían las lenguas de doble filo- "demasiado fuerte". Lo cierto es que la empresa de comunicaciones (más de 27.500 millones de beneficio obtenidos en el ejercicio pasado) no pudo hacer frente a las numerosas órdenes de compra que llegaron.
Los bancos, por su lado, se encontraron con mayoría de órdenes compradoras, que totalizaron 28.260 títulos, frente a los 14.461 a la venta que presentó Banesto (la única entidad con signo negativo). El saldo comprador se situó en 13.809 acciones, que demuestran las pocas ganas de vender que circulan por la bolsa. A este respecto, tampoco se pudieron realizar algunas compras de cierta entidad en diversos valores eléctricos al no hallarse suficiente papel dispuesto a cambiar de manos. Y ni hablar siquiera de .alguna rebajita por estas operaciones millonarias.
Por otra parte, Campsa descontó ayer las 31,50 pesetas del dividendo neto, por lo que recupera 1,3 enteros al cotizar a 200 frente a los 205 del día anterior. Uralita, por su parte, comenzó el plazo de suscripción de su aumento de capital en 1.751,514 millones de pesetas, en la proporción de tres acciones nuevas por cada ocho antiguas, liberadas al 40%. El valor terminó la sesión recuperando 0,15 enteros.
El Águila sufrió ayer una rentrée poco afortunada, ya que después de haber informado en su junta de accionistas sobre la próxima ampliación de capital, dejó en el empeño 11 enteros.
Aunque el mercado se muestra más consolidado, especialmente debido a las palabras de Mariano Rubio, las aguas tenderán a volver a sus mediocres cauces de negocío.en cuento menos se piense. Los volúmenes de contratación siguen siendo pequeños -813,9 millones de pesetas efectivas en lajornada del martes- y,el dinero no aumentará en los próximos días.
A este ambiente, que bien puede calificarse como incierto, se une el miedo de los operadores a que hoy vuelvan a hacer acto de presencia las realizaciones, como ya viene siendo habitual en los jueves pasados. Los expertos prefieren apostar por la prudencia, ya que se puede dar un cambio de tendencia con un número muy limitado de órdenes vendedoras.
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