La policía italiana clausura el 'teléfono rosa', dedicado a diálogos eróticos

La policía ha clausurado un número de teléfono de Turín, a través, del cual se practicaba la primera experiencia italiana de teléfono rosa, desde el que tres jóvenes azafatas cultivaban los fantasmas eróticos de sus comunicantes masculinos. El teléfono ha sido clausurado a las tres semanas de entrar en funcionamiento, por estimar que atentaba contra las buenas costumbres.Luana, Serena y Samantha son los nombres de guerra de las tres mujeres, de unos 30 años, casadas, que dedicaban ocho horas diarias durante seis días a la semana a conversar telefónicamente con los clientes durante 10 minutos, siempre que éstos hubieran mandado antes un giro postal de 20.000 liras (unas 2.000 pesetas).

Un periodista de L'Espresso que realizó la experiencia ha afirmado que el diálogo era frío, cargado de estereotipos y de descripciones anatómicas muy crudas. Este servicio telefónico existe en Estados Unidos y tiene gran éxito.

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