Relevados del mando los dos oficiales responsables de la 'operación especial'

La Dirección de Relaciones Informativas y Sociales de la Defensa (DRISDE) difundió ayer una nota en la que señala que, "sin perjuicio de las responsabilidades que pudieran derivarse del expediente no judicial abierto en la Capitanía General de la V Región Militar (Zaragoza), se ha resuelto corregir disciplinariamente a los oficiales que intervinieron en el incidente, el capitán Carlos Alemán Artiles y el teniente Jaime Íñiguez Andrade, y ordenarles que entreguen el mando de sus respectivas unidades hasta el completo esclarecimiento de los hechos".El capitán general de la VI Región Militar (Burgos), teniente general Vicente Izquierdo, ha ordenado la apertura de una información no judicial sobre el suceso ocurrido la noche del pasado día 6 en la localidad oscense de Abena, donde miembros de las Compañías de Operaciones Especiales (COE) del Ejército simularon un fusilamiento contra el alcalde y otro vecino de la localidad. Ayer, dos comandantes se desplazaron allí para investigar en el pueblo detalles relacionados con el incidente. Los dos jefes, uno de ellos perteneciente al COE, conversaron una hora con el alcalde.

Los miembros del Ejército que participaron en dicho simulacro pertenecen a la 62ª Compañía de las COE, con sede en Munguía (Vizcaya), que se encuentra, por tanto, bajo la jurisdicción de la VI Región Militar.

La Capitanía General de Zaragoza, por su parte, ha abierto una investigación no judicial sobre este incidente, en relación al cual la nota del DRISDE pone de relieve que "los ejercicios de guerrillas constituyen una de las actividades incluidas en el Plan General de Instrucción del Ejército de Tierra, y en ellos participa la totalidad de sus unidades operativas. También los realizan los centros de enseñanza, y en este caso, la Escuela Militar de Montaña y Operaciones Especiales de Jaca".

"Para todos estos ejercicios", continúa la nota, "se imparten unas instrucciones particulares en las que se ordena claramente la conducta a seguir en cuanto al absoluto respeto a personas y propiedades situadas en la zona de los ejercicios y también la no realización de acciones que interfieran las actividades normales ciudadanas o indebidamente produzcan alarma".

El presidente del Gobierno aragonés, Santiago Marraco, manifestó ayer a Efe que este incidente perjudica a la imagen de las Fuerzas Armadas en la sociedad. El presidente de las Cortes de Aragón, Antonio Embid, calificó el suceso de "mancha en la limpia imagen de las Fuerzas Armadas".

En una declaración institucional las Cortes regionales señalan que las Fuerzas Armadas son "plenamente conscientes de su posición constitucional" y "de su servicio al pueblo".