El Auditorio Nacional, con capacidad para unas 3.000 personas, se podrá utilizar a partir de 1987

El Auditorio Nacional podría ser utilizado a finales de 1987. Una gran sala para la Orquesta Nacional de España, con capacidad para 2.274 personas, y una segunda sala para música de cámara, con 619 plazas, integran las piezas básicas del edificio, de 22.000 metros cuadrados, que se construirá en la prolongación de la calle del Príncipe de Vergara en tres parcelas situadas entre López de Hoyos y la plaza de Cataluña. El diseño del edificio es obra del arquitecto José María García de Paredes, autor también del auditorio Manuel de Falla de Granada.

José Manuel Garrido, director general de Música y Teatro, coincide con el arquitecto García de Paredes en afirmar que el Auditorio Nacional supondrá la creación de una de las primeras salas de música más importantes de Europa, ya que antes de hacer su diseño se han tenido en cuenta las características, fallos y aciertos de los principales auditorios europeos.Para mayores garantías respecto al resultado final, José María García de Paredes ha contado con la opinión y asesoramiento del director de la Orquesta Nacional, Jesús López Cobos. "También hemos contado -añade el arquitecto- con la asesoría del profesor Cremer, quien está considerado como el máximo especialista en acústica musical de Europa. Yo no estoy especializado en auditorios, y además creo que un arquitecto tiene que saber hacer toda clase de construcciones".

El Auditorio Nacional, cuyas obras se empezarán a construir durante la primera quincena de julio con un presupuesto de 1.637 millones de pesetas, será un edificio de tres plantas. El aspecto exterior pretende recoger la arquitectura de la época actual, evitando las modas arquitectónicas pasajeras. El granito y el ladrillo son los dos materiales elegidos para cubrir el exterior.

En el interior se ha pretendido que las salas tengan el máximo aforo que permita establecer unas condiciones acústicas óptimas. La independencia de ambas salas es total, hasta el punto de que, pese a su proximidad, se pueden celebrar conciertos a la misma hora sin que se produzca ninguna interferencia. Los escenarios de las dos salas disponen de plataformas hidráulicas capaces de hacer sustituir con toda rapidez los instrumentos de los concertistas. Respecto al aspecto interior, el arquitecto explica que se ha pretendido dar una gran sensación de sosiego y quietud. Los colores claros de las paredes se alternarán con las maderas de los techos y de los paneles a la vez que se ha tratado de simplificar el acceso a las diferentes salas del auditorio.

Además de estas dos grandes salas, el Auditorio Nacional dispone de espacios auxiliares. La pieza más importante dentro de este segundo grupo es la sala de ensayos del Coro Nacional, cuya capacidad es de 300 plazas, que puede ser utilizada como sala alternativa para cursos, conferencias o conciertos de música experimental.

Al margen del Auditorio, Nacional, la infraestructura musical diseñada por el Ministerio de Cultura para toda España tiene prevista la construcción de auditorios en Santander, Valencia, Las Palmas y Barcelona. El proyecto más avanzado es el de Valencia cuyo diseño ha sido realizado también por el arquitecto José María García de Paredes.

Según José Manuel Garrido, en un plazo de 10 años España puede contar con un mapa musical que cubra las necesidades mínimas. "No se trata de construir auditorios en todas las ciudades", dice Garrido, "sino de que en todas aquellas zonas claves e intermedias se pueda disponer de un espacio digno, de forma que no haya zonas desasistidas. Durante este ejercicio hemos querido crear esa infraestructura mínina. Pero su realización definitiva tendrá que ser terminada por sucesivas administraciones".