_
_
_
_
GALICIA

Tres jóvenes, acusados de realizar varios atentados de signo ultraderechista en Vigo

La operación emprendida por el Gobierno Civil de Pontevedra para desarticular las bandas fascistas que operan en Vigo desde finales del año pasado ha dado como resultado la detención y puesta a disposición judicial de los tres autores de la Mayoría de una serie de atentados de tendencia ultraderechista.

Dos de los detenidos fueron, militantes de la desaparecida organización Fuerza Joven, rama juvenil de Fuerza Nueva, y mantienen vínculos de afinidad ideológica con un amplio grupo de jóvenes procedentes de la misma organización, con los que se ven frecuentemente. Estos dos detenidos son Alfonso C. M., de 19 años, y Cristóbal Rafael S. L., de 16, estudiantes los dos y vecinos de Vigo. El otro detenido responde a las iniciales J. C. M., de 15 años, estudiante, natural y vecino de Vigo y amigo de los dos citados.Ese menor parece ser el cerebro del grupo y, según se desprende de las pesquisas policiales, es un fanático del nazismo, del cual posee una amplia bibliografía. J. C. M. se ha confesado autor de una serie de pintadas de corte fascista aparecidas en la ciudad, firmadas por Lobos grises. Según su declaración, él es el único miembro de ese grupo. También se confesó autor de la rotura de las cristaleras de Edicions Xerais de Galicia, así como del atentado sufrido por un automóvil de matrícula francesa en cuyo interior arrojó un cóctel molotov que originó un pequeño incendio.

Este atentado tuvo lugar el 23 de marzo, poco después del ametrallamiento de unos pesqueros de Ondárroa por patrulleras francesas. A raíz de este incidente con, Francia, los otros dos detenidos habían roto también los cristales de una tienda de automóviles a la que arrojaron un cóctel molotov que no llegó a explotar, dejando pintadas con el texto "Nada francés".

Pocos días después, los dos muchachos de mayor edad, con las cabezas cubiertas con capuchas blancas, rompieron los cristales del escaparate de una tienda dedicada a la venta de automóviles y recambios, arrojando igualmente a su interior un cóctel molotov que originó un grave incendio, con daños valorados en 60 millones de pesetas, que obligó a los bomberos a desalojar a todos los vecinos del edificio.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_