Duro enfrentamiento entre socialistas y empresarios del sector eléctrico en el Congreso

El Grupo Parlamentario Socialista y empresarios del sector eléctrico protagonizaron ayer un duro enfrentamiento en el Congreso de los Diputados, en la primera jornada informativa sobre el Plan Energético Nacional (PEN) presentado por el Gobierno. La polémica se produjo en la Comisión de Industria y Energía al plantearse el endeudamiento que experimentan las empresas eléctricas privadas españolas y sobre la necesidad de. que se autorice la construcción de una central nuclear de las cinco paralizadas en el proyecto.Carlos Dávila, portavoz del Grupo Socialista en la Comisión de Industria del Congreso, acusó al sector eléctrico de dar una "versión idílica y alegre" de la situación financiera de las empresas y responsabilizó a los gestores privados de ser los culpables, en última instancia, de la operación de saneamiento financiero que el Gobierno actual "no ha tenido más remedio que poner en práctica". Juan Alegre Marcet, presidente de Unidad Eléctrica (Unesa), rechazó esta interpretación y señaló que con una política de aumentos reales de las tarifas en torno a los incrementos del índice de precios al consumo (IPC) el sector eléctrico ni tendría ningún problema. El representante de las compañías eléctricas aclaró que, pese a los calificativos utilizados por el diputado socialista, las compañías eléctricas "no han necesitado ayudas de ningún tipo del erario público ni requerido las asistencias que otros sectores en reconversión están recibiendo en la actualidad".

Alegre Marcet reconoció que las empresas están en una situación de endeudamiento importante, pero matizó que éste se ha debido a factores exógenos a la responsabilidad del sector.

En relación a la moratoria nuclear contenida en el PEN de 1983, el representante del sector eléctrico señaló que las empresas nunca han estado en contra de una parada a tiempo de los programas nucleares anteriores y que lo único que ahora reclaman es el enchufe a la red de una instalación o grupo nuclear más. Se trata, señaló Alegre, de cubrir el presunto déficit que puede haber en la oferta energética por medio de una instalación más, que además se encuentra en estado avanzado de construcción. Para el presidente de Unesa, una parte de los problemas financieros del sector eléctrico pueden derivarse del alcance de la moratoria.

Sobre el mismo tema, el secretario general de la Energía, Martín Gallego, señaló que el PEN es cauteloso a la hora de hacer previsiones de crecimiento de la demanda energética en el período abarcado por el plan presentado y anticipó que el propio documento establecía un sistema corrector a medio plazo en el caso de que la demanda de energía creciese por encima del 3,3% acumulativo anual que se estima lo hará hasta 1990.

En la primera sesión informativa de debate del plan energético intervinieron también Miguel Muñiz, secretario general de Economía y Planificación; Enrique Moya, presidente del Instituto Nacional de Industria; Pedro Durán Farrel, presidente de Catalana de Gas; Feliciano Fuster, presidente de ENDESA; Ignacio Bayón, ex ministro, y Enrique Kaibel, director general de Sercobe.