El 'tren de la fresa' vuelve al segundo trayecto del ferrocarril español, de Madrid a Aranjuez

Una locomotora de vapor, que utiliza fuel, y 10 coches, incluido el correo, formaron ayer el nuevo tren de la fresa, que volvió a recorrer el trayecto Madrid-Aranjuez y regreso, a los 133 años de su inauguración. La salida de la estación de Atocha se produjo a las 10.52, con siete minutos de retraso sobre lo previsto. El tren, en el que viajaban autoridades locales y regionales, varias decenas de turistas japoneses y el diputado Santiago Carrillo, tuvo que realizar una parada forzosa en Valdemoro, a causa de una amenaza de bomba.

A partir del próximo mes de julio se reanudará el servicio del llamado tren de la fresa, entre Madrid y Aranjuez. Se realiza, de esta forma, un viejo proyecto del ayuntamiento de la segunda localidad citada, que desea promocionar con fines turísticos el acceso a Aranjuez por ferrocarril y convertir la visita al Real Sitio en una excursión casi obligada para los turistas que llegan a la capital de España. La periodicidad del servicio será semanal.El tren de la fresa, promovido por el marqués de Salamanca, se inauguró el 9 de febrero de 1851 y fue la segunda línea ferroviaria que se construyó en España, después de la que unía Barcelona y Mataró. Su trazado constituyó el primer tramo de la línea Madrid-Alicante.

El Ayuntamiento de Aranjuez pretende potenciar el atractivo turístico y cultural de esta ciudad a través de la recuperación del servicio de aquel tren, popularmente bautizado con el nombre de uno de los productos más típicos de la huerta del Real Sitio. El restablecimiento inicial de la línea, ayer, forma parte del programa de las fiestas de San Fernando, patrón de Aranjuez. El tren hubo de detenerse en Valdemoro, a las 12.30, por una llamada anónima que anunció la colocación de un artefacto explosivo en la vía, a unos 20 kilómetros de Aranjuez, según fuentes de Renfe. Reanudó su marcha 15 minutos después, tras cambiar de vía.

Se agotaron los billetes

En esta primera expedición viajaron unas 700 personas, la mitad de las cuales, aproximadamente, eran invitados, entre autoridades del Gobierno regional o de Ayuntamientos madrileños, Renfe, periodistas y algunos políticos, entre ellos Santiago Carrillo, diputado del PCE. Otros dos contingentes numerosos fueron los de la Asociación de Amigos del Ferrocarril y un grupo de unos 160 japoneses, que habían contratado su plaza en una agencia de viajes. Numerosas personas que intentaron ayer mismo realizar el viaje tuvieron que quedarse en los andenes, porque los billetes se habían agotado.El tren fue conducido por el maquinista Valentín Manzanares, de 50 años, casado, destinado en Ciudad Real. La máquina de vapor, tipo Mikado, fabricada en Escocia en 1953 y transformada en 1963 para sustituir la caldera de carbón por un quemador de fuel, arrastró 10 coches con un peso aproximado a las 400 toneladas. Entre ellos, el más antiguo de los que circulan actualmente en el parque comercial, que data de 1931. El último era un coche-correo, y en él se despacharon tarjetas y sellos con un matasellos alusivo a la celebración.

Artistas locales de Aranjuez, ataviados con trajes de la época del tren de la fresa, clausurado hace 55 años, paseaban ayer por los andenes de la estación de Atocha.

Los viajeros fueron agasajados en Aranjuez por un comité de recepción al que se incorporó el alcalde, Eduardo García.