El Paraguay, en EL PAIS
Tengo el agrado de dirigirme a usted a fin de rectificar el contenido de los artículos publicados sobre El Paraguay, su Gobierno y el presidente Stroessner en el diario EL PAIS el sábado día 5, el domingo 6, y el martes 8, en la sección de Internacional, por contener informes inexactos y por considerar que la divulgación de las mismas causa un injusto perjuicio al Paraguay y a su Gobierno. ( ... )EL PAIS no suele referirse a la salud ni a la moral de políticos o gobernantes españoles, por consiguiente, ¿con qué derecho y legitimidad ética puede referirse a supuestas deficiencias de salud o de moral de ciudadanos paraguayos?
Dice EL PAIS que el presidente Stroessner es rubio y descendiente de alemanes, ¿es un pecado político eso? También hay ministros paraguayos descendientes de españoles. Y hay políticos españoles que descienden de alemanes o belgas y otros de judíos y algunos evidentemente de los moros; es acaso esto trascendente para un análisis riguroso de la situación política de un país? Sólo esto descalifica los artículos de Martín Prieto y Rafael Fraguas, que convierten a los citados artículos de EL PAIS en expresiones de comentarios falaces sobre la salud, la moral, los juegos de salón o deportivos sobre los gobernantes paraguayos.
En cuando a la legitimidad del Gobierno paraguayo, EL PAIS invoca notorias inexactitudes. En 1954 sucede al presidente Federico Chaves el arquitecto Tomás Romero Pereira, el cual posteriormente llama a elecciones, en las que se presenta el Partido Colorado, con su candidato el general Alfredo Stroessner.
Remito a usted fotocopia de la
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