Ana Dmitrieva estrena su función de primera dama

Con la visita de la reina Sofía de España a la URSS, Ana Dmitrieva Chernenko, esposa del máximo dirigente soviético, se ha estrenado en su función de primera dama del país en la esfera representativa internacional, algo que jamás hiciera la esposa de Yuri Andropov, italiana, quien sólo salió a la luz pública vestida de negro en su condición de viuda.Por primera vez desde que Chernenko sustituyó a Andropov, los soviéticos han podido estos días, en dos ocasiones, contemplar en la portada de Pravda la figura de una mujer de cabello plateado, pequeñita y más bien rechoncha, que sonreía posando junto a la Reina de España.

En un país donde las vidas privadas de los dirigentes se mantienen celosamente guardadas, puede decirse que la prodigalidad de apariciones por parte de Ana Dmitrieva, mientras la Reina ha estado en Moscú, constituye un hecho excepcional. En este país, donde no hay Prensa del corazón ni existen los ecos de sociedad, resulta curioso oír a ciudadanos soviéticos que, sin ser preguntados, hacen comentarios favorables sobre los trajes, peinado y figura de la reina Sofía.

La señora de Chernenko, a la que la Prensa nombra únicamente con el término de supruga (esposa), pero de la cual la televisión dio el nombre completo, apareció en la pequeña pantalla durante las informaciones sobre la visita real a Moscú. Vestida con un discreto traje marrón estampado con motivos florales, se la vio en el palco de honor del teatro Bolshoi acompañada de Lidia Dmitrieva Gromiko, la esposa del ministro de Asuntos Exteriores de la URSS, con quien compartió la tarea de hacerle los honores. a la Reina.

Ambas damas soviéticas recibieron a la reina Sofía en el aeropuerto, fueron con ella a la escuela coreográfica del Bolshoi y la despidieron en el patio del gran palacio del Kremlin. De ademanes reposados, la señora de Chernenko, departió con la Reina sin perder jamás la sonrisa.

Éstas no han sido, sin embargo, las primeras apariciones públicas de Ana Dmitrieva, a quien se vio por primera vez envuelta en pieles, depositando su voto en las elecciones al Soviet Supremo del pasado 4 de marzo. Pocos días después, con motivo del Día Internacional de la Mujer, la señora de Chernenko invitó a las embajadoras acreditadas en Moscú a una merienda. Allí, entre las anfitrionas, había varias consortes de miembros del Politburó, tales como la señora de Gromiko y la viuda de Breznev.

Informaciones fragmentarias permiten juntar varios datos familiares sobre Ana Dmitrieva Chernenko. Tiene dos hijos: Elena, que trabaja en el instituto de marxismo-leninismo y que publicó un artículo en Pravda en febrero pasado, y un hijo que es periodista y trabaja en el ámbito cinematográfico.