_
_
_
_
_

La incorporación de tecnología a los sectores tradicionales, clave del futuro industrial de Cataluña

La potenciación de los sectores industriales tradicionales catalanes, su incorporación cualificada al proceso tecnológico; la inversión en actividades innovadoras y la descentralización se consideraron los objetivos fundamentales para el inmediato futuro industrial de Cataluña durante los debates desarrollados en las Jornadas sobre Desindustrialización en Cataluña, clausuradas ayer en Barcelona.

Los ponentes coincidieron en afirmar que la industria tradicional catalana contiene los elementos básicos necesarios para competir en el mercado internacional, en base a su potenciación como creadora de productos de alta calidad y diseño. La falsa disyuntiva entre la inversión en sectores punta y la modernización de la industria tradicional fue una de las coincidencias básicas de los debates, hasta el punto que Pere Nueno, profesor del Instituto de Estudios Superiores de la Empresa, calificó a la industria tradicional catalana como "la verdadera industria del futuro", siempre que a ella se incorp.oren procesos tecnológicos como la informática distribuida y la robótica, paralelamente al diseño y a la mejora de calidad.Jacint Ros i Hombravella, catedrático de Política Econó mica de la Universidad Autónoma de Barcelona, calificó esta industria como tradicional por su larga tradición manufacturera, capitalización media moderada, alto valor añadido y del factor trabajo, así como por la tecnología atrasada y capitalización media moderada. Ros cuantificó las medianas y pequeñas empresas que compo nen este subconjunto industrial catalán en casi la mitad del sector secundario y afirmó que en tre ellas se encuentran muchos productos con buenas posibilidades de mercado interno y externo. La racionalización de la gestión, una comercialización revolucionada, el diseño del producto y la especialización de la fuerza de trabajo fueron apuntados por Ros Hombravella como elementos imprescindibles para la modernización de estos sectores.

La afirmación de las posibilidades activas de Cataluña para revitalizar su industria fue también mantenida por Joaquim Muns, catedrático de Organización Económica Internacional de la Universidad de Barcelona. Muns afirmó que Cataluña cuenta con un nivel cultural elevado, similar en muchos aspectos al de las regiones más industrializadas de Europa, asi como con una bale econórnica amplia y diversificada y un nivel de mano de obra y de efectivos empresariales destacable.

Señaló que el futuro industrial de la industria catalana se encuentra en la explotación máxima de tres líneas de actuación: la utilización prioritaria de los recursos propios en todos los campos posibles, la especialización y el énfasis en la calidad y las aportaciones tradicionalmente artesanales. Un proceso similar, para Muns, habrían seguido los países del norte de Europa, de características similares a las de Cataluña. Destacó que las industrias tradicionales catalanas podrían convertirse, modernizadas, en piezas importantes de la economía.

El factor de alta absorción de mano de obra favorecería, para Muns, la aportación de habilidades tradicionales, de forma que los productos, por su cualificación, difícilmente podrían ser desplazados por los nuevos países industriales.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_