Natali reconoce que hay un retraso en las negociaciones para la adhesión, aunque no voluntariamente provocado por la CEE
Lorenzo Natali, vicepresidente de la Comisión Europea y encargado de la ampliación de la CEE, reconoció ayer en Madrid que existe un retraso en el calendario de negociaciones para la adhesión de España. Sin embargo matizó éste no obedece a ninguna estrategia preconcebida de los países miembros, como podía deducirse de las afirmaciones realizadas el día precedente por el secretario de Estado español, Manuel Marín. El calendario previsto por la presidencia francesa situaba el 30 de septiembre como fecha final de las negociaciones hispano-comunitarias de adhesión.
En declaraciones al finalizar la reunión de trabajo en el palacio de la Trinidad, sede de la Secretaría de Estado para la CEE, el vicepresidente comunitario admitió -al subrayársele que la CEE no había cumplido hasta ahora el calendario de la negociación con España, particularmente en el apartado de agricultura y pesca- que "puede ser que haya un retraso de hecho en estas negociaciones"."El calendario propuesto por la presidencia francesa era simplemente indicativo" manifestó. "Pero un corto retraso en los capítulos agrícola y pesquero, que son los más conflictivos e interesantes, puede significar, sin embargo, la posibilidad de llegar a soluciones equilibradas".
El comisario encargado de la ampliación -que mantuvo una cena de trabajo con el ministro, español de Agricultura el jueves por la noche y se reunió ayer por la mañana con el titular de Exteriores, Fernando Morán- no pudo concretar cuándo podrá presentar la Comisión Europea su postura. definitiva sobre esos dos capítulos claves en la negociación. La respuesta de Bruselas debía haberse producido, según el calendario previsto, en la sesión ministerial de los días 9 y 10 de abril.
De las palabras del dirigente comunitario se puede deducir que tampoco estará ultimado en la reunión que se celebrará el próximo 25 de mayo a nivel de suplentes. "En estos momentos no puedo hacer predicciones respecto a la fecha en que estará concretada la posición definitiva de la CEE en esos dos capítulos", dijo Natali.
"En el agrícola hemos decidido seguir manteniendo contactos antes de concretar los documentos, con objeto de clarificar nuestros puntos de vista. Y también sigue, por el momento, el trabajo interno de la CEE para perfilar lo que será su declaración definitiva sobre el capítulo pesquero".
Miedo infundado
Natali a quien el propio Fernando Morán volvió a reiterarle en la mañana de ayer la preocupación del Gobierno español por el retraso en las negociaciones, considera sin embargo "infundado" el temor del Ejecutivo español en este aspecto.
"Puede que haya miedo en España de que se produzca una táctica dilatoria en este proceso negociador por parte de los países del Mercado Común, pero creo que es un miedo totalmente infundado. Pero, desde luego, no hay polémica entre Manuel Marín y yo. Sus declaraciones obedecen a preocupación lógica de su Gobierno".
"Quisiera decir", añadió el vicepresidente comunitario, "que en los años pasados los periodistas me han preguntado continuamente por la fecha de adhesión de España. Yo siempre he dicho que lo importante era realizar una buena adhesión, que fuera equilibrada. Hoy tengo que subrayar que la fecha del 30 de septiembre fijada para terminarlas negociaciones bilaterales es la prueba evidente de la voluntad política de la CEE para finalizarlas. Este objetivo temporal es muy importante, porque subraya la voluntad real de progresar".
"No hay, por tanto, ninguna diferencia entre las posiciones que personalmente he mantenido antes y las que mantengo ahora, ni con el deseo de hacer una negociación en buenas condiciones".
En el apartado referente a las islas Canarias, para las que el Gobierno español desea conseguir un estatuto especial, Natali subrayó que el secretario de Estado español se había comprometido a contestar al cuestionario solicitado por la Comunidad, "que es fundamental para establecer la posición comunitaria sobre este aspecto, para poder elevar al Consejo de Ministros la posición de la Comisión".
Previamente, por la mañana, los parlamentarios de la comisión mixta Cortes Españolas-Parlamento Europeo subrayaron su confianza en que los problemas comunitarios que hipotecan el progreso en las negociaciones para la ampliación puedan quedar solventadas en breve.
En el comunicado conjunto hecho público tras los dos días de reuniones, el comité mixto Cortes Españolas-Parlamento Europeo "alabó el establecimiento de un calendario de negociaciones" aunque reiteró que "el deseo de ajustarse a dicho calendario no fuera en detrimento, sobre una base firme y equitativa, de la resolución de los problemas pendientes".
Los miembros del comité mostraron su satisfacción por la declaración del Parlamento Europeo respecto a la creación de una Universidad Euro-Arabe en España, así como el de un Instituto Europeo-Latinoamericano.
Este evidente cambio de postura, al menos a nivel de declaraciones, del Gobierno español respecto al proceso negociador con la CEE, se considera en círculos solventes como una estrategia para cubrirse las espaldas ante la hipotética imposibilidad de cerrar la negociación, con garantías, en las fechas previstas. Además, parece evidente la relación de esta advertencia realizada por los negociadores españoles con las próximas entrevistas que mantendrá el presidente Felipe González con diferentes dirigentes europeos.
