Cada día me pincho
Lo hago desde hace 15 años, dos veces al día, y si no lo hiciera así creo que me moriría en menos de tres semanas.¿Duro? ¡Bah, no mucho!
Afortunadamente, puedo hacer una vida absolutamente normal, sexual, laboral, deportiva..., y por menos de 1.000 pesetas al mes compro las dosis que necesito en la farmacia. Lo que sería insoportable es que cada pinchazo me costase 2.000, 3.000 o 10.000 pesetas.
Le hago estas confidencias después de leer el artículo de Fernando Savatar del pasado día 26 de abril, y con el que estoy totalmente de acuerdo: La incurable adicción a la droga.
Creo que mi caso es también el de otro millón más de españoles, diabéticos y dependientes de una droga que nos cura: la insulina.
Me pregunto qué diferencia hay en que una vida humana dependa de una droga llamada insulina u otra llamada heroína.
También me pregunto si los Gobiernos occidentales están esperando a que el consumo de cocaína y heroína sea absolutamente masivo para empezar a despacharlas legalmente, como el alcohol, los automóviles, la electricidad, el agua, los cuchillos de cocina o el tabaco, productos todos ellos que también matan. Yo, a mi pesar, estoy atado a una droga a un precio razonable. ¿Por qué no han de tenerlo así los heroinómanos? /