El Estado cumplirá sus obligaciones con los pensionistas

"Es impensable una eventualidad en que el Estado deje de pagar pensiones a todos y cada uno de los ciudadanos españoles que a ellas tengan derecho y en la cuantía que les corresponda", manifestó ayer Laureano Lázaro, jefe del gabinete técnico del secretario general para la Seguridad Social, en el curso de su intervención en el Congreso Internacional de Fondos de Pensiones que se celebra estos días en Madrid.Laureano Lázaro manifestó que sí puede hablarse, sin embargo, de quiebra de un determinado y concreto modo de funcionamiento de la Seguridad Social española, concebido para otro momento histórico distinto al actual, tanto en lo económico como en lo político. "En este caso", afirmó, "quiebra significa el agotamiento de un modelo que llega al fin de sus posibilidades arruinado por sus contradicciones".

El secretario de Estado de Economía y Planificación, Miguel Ángel Fernández Ordoñez, en el mismo congreso, y en una intervención fundamentalmente destinada a poner de manifiesto los logros en materia económica conseguidos por la Administración socialista, se refirió a que el establecimiento de los fondos de pensiones permitirá "desde el punto de vista financiero, canalizar un gran porcentaje de fondos hacia activos emitidos a largo plazo, lo que representará una incidencia especial sobre nuestro mercado de valores, afirmándolo y fortaleciéndolo".

Miguel Ángel Fernández Ordóñez declaró también que la normativa futura que regulará estos fondos de pensiones se encuentra en avanzado estado de gestación.

El presidente del Congreso Internacional de Fondos de Pensiones, Mariano Rabadán, en su discurso de apertura, puso de manifiesto que "es indispensable una reforma profunda del actual sistema de pensiones que permita la cobertura de unas prestaciones adecuadas por parte de la Seguridad Social pública, complementadas a través de prestaciones adicionales, particularmente mediante la fórmula de los fondos de pensiones, cuya regularización legal se prepara y que es la más generalizada a nivel internacional".

Para Rabadán, la disminución de la población activa y el aumento del paro han originado una reducción de la tasa de crecimiento de los ingresos de la Seguridad Social en casi todos los países, mientras que las prestaciones, especialmente en materia de seguro de desempleo, han registrado sensibles incrementos.

Esta situación ha provocado importantes desajustes en los sistemas de financiación de la Seguridad Social pública y en el caso español ha venido a afectar directamente al capítulo de pensiones, que en este momento representa más del 57% de los gastos de la Seguriad Social.

"De continuar por este camino", señaló Mariano Rabadán, "dentro de tres años la Seguridad Social española presentará un déficit superior a los 1,6 billones de pesetas, cifra sensiblemente superior al actual déficit del sector público".