Ruiz-Mateos, considerado persona no grata por el Gobierno británico, tendrá que abandonar mañana el Reino Unido

El último permiso de cinco días que las autoridades de inmigración del Reino Unido concedieron el pasado viernes a José María Ruiz-Mateos para permanecer en Londres -a menos que presentara recurso judicial contra la orden administrativa de expulsión (no entry)- termina mañana. Según ha confirmado a este periódico un portavoz oficial británico, Ruiz-Mateos tiene que abandonar el país mañana, miércoles.

Los abogados han aconsejado al ex presidente de Rumasa que no presente recurso legal alguno contra la decisión del Home Office (Ministerio del Interior) ante la High Court of Justice de Londres (Alto Tribunal de Justicia) para no perjudicar con ello la obtención de un posterior permiso de residencia solicitado, eventualmente, desde otro país. Ruiz-Mateos ha renunciado, por el momento, según fuentes familiares, a recurrir ante los tribunales, y deberá, por tanto, abandonar el Reino Unido el próximo miércoles 18 de abril, tal como le señalaron las autoridades de inmigración. Si no saliera voluntariamente mañana o pasado mañana, el fundador de Rumasa sería entonces detenido por la policía británica, que le acompañaría al aeropuerto hasta que abandonara el país.Oficialmente, las autoridades británicas afirman que no renuevan el permiso de residencia a Ruiz-Mateos debido al incumplimiento de ciertas normas burocráticas. El ex presidente de Rumasa, que desde el día 3 de marzo de 1983 vivía en Londres -adonde llegó en avión procedente de Toulouse, con escala en París, acompañado por su colaborador Carlos Quintás-, no había solicitado la residencia definitiva dentro del plazo del primer año de residencia provisional.

Presiones políticas

No obstante, además de estos problemas burocráticos, han existido insistentes peticiones verbales del Gobierno español al británico, por vía diplomática, para que no le fuera renovado el permiso de residencia a José María Ruiz-Mateos. Las presiones políticas se acrecenta ron sobre todo después de que éste hubiera declarado haber mantenido contactos con algunos generales españoles, lo que motivó nuevas investigaciones del CESID (Centro Superior de Información de la Defensa) sobre presuntas operaciones involucionistas.

Las soprendentes acusaciones de soborno que el fundador de Rumasa vertió desde Londre contra funcionarios españoles incluido el propio rey Juan Carlos -lo que le valió un nuevo procesamiento, esta vez por injurías al jefe del Estado-, y la amenaza de celebrar una conferencia de prensa para comunicar graves revelaciones al cumplirse el primer aniversario de la expropiación de Rumasa contribuyeron también a que el Gobierno británico fuera más sensible a las peticiones españolas. Por todo ello, José María Ruiz-Mateos ha sido declarado finalmente, al parecer sólo de forma verbal, persona no grata en el Reino Unido. Los dos permisos de residencia temporal, por cinco días, que ha obtenido desde que regresó de su viaje de 43 días por Estados Unidos y el Caribe, el pasado 7 de abril, podrían haber estado vinculados a la promesa firme de Ruiz-Mateos de no hacer declaraciones que pudieran molestar al Gobierno español durante su estancia en Londres.

Injurias al Rey

Por otra parte, círculos próximos a la familia consideran ahora que las posibilidades de obtención de un futuro permiso de residencia en el Reino Unido que puede ser solicitado dentro de 15 o 20 días desde otro país, podrían estar también relacionadas con una prevísiblemente próxima retractación pública por parte de Ruiz-Mateos de las acusaciones vertidas, en momentos de "fuerte tensión psíquica y acorralamiento personal", sobre la persona del Rey de España. Al parecer, tras unos días en países del Caribe, Ruiz-Mateos reconoció por primera vez, ante unos amigos suyos, que las acusaciones que hizo contra el rey Juan Carlos habían sido "un disparate".

José María Ruiz-Mateos partirá de Londres quizá hoy mismo, antes de que acabe el permiso de cinco días, o mañana, con destino a un país americano, con escala en Miami (Florida, Estados Unidos). Los hijos del matrimonio Ruiz-Mateos -a excepción de su hija Socorro, que reside en Argentina- se encuentran desde el pasado jueves en España, distribuidos entre Jerez de la Frontera y Madrid con familiares y amigos. Mañana regresará a España la esposa de Ruíz-Mateos, Teresa Rivero, tras la salida de Londres de su marido. Después de las vacaciones de Semana Santa, es posible que Teresa Rivero y algunos de sus hijos mayores se reúnan en América con Ruiz-Mateos.