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CATALUÑA

La policía halla estricnina en 39 'papelinas' de heroína que se incautaron en Barcelona

La policía de Barcelona ha hallado estricnina en 39 papelinas de heroína incautadas al ciudadano marroquí Hamidd Mohand Abdel-Kader Musa, detenido a finales de la semana pasada por inspectores adscritos a la Brigada Regional de la Policía Judicial. Pese a que la dosis de sulfato de estricnina contabilizada en la droga incautada no conduciría necesariamente a la muerte de quien se la inyectase, su descubrimiento confirma la presencia de ese veneno en la heroína que se vende en Cataluña y el grave peligro que corren los adictos, según fuentes policiales.

Los resultados de los análisis iniciales de la heroína incautada confirman que algunos distribuidores de Barcelona cortan habitualmente la droga con sulfato de estricnina, para aumentar el número de papelinas o papeletas -nombres con los que se conocen en el argot las dosis individuales que se distribuyen al consumidor- que consiguen sacar de una partida determinada (ver EL PAÍS del 20 de enero). La estricnina es letal en porciones de 10 a 15 centígramos.Según un informe policial sobre el problema, la estricnina en dosis de pocos miligramos produce un aumento del vigor de las contracciones cardíacas, tonifica el sistema nervioso y estimula la respiración, entre otros muchos efectos.

El sulfato de estricnina, ideal para 'cortar'

Este hecho, unido al especial sabor de esa droga para sus adictos, convierte al sulfato de estricnina en la sustancia idónea para los distribuidores para cortar la heroína antes de venderla a los consumidores.En Italia, la presencia de la estricnina en la heroína que se distribuye al consumidor es casi habitual, según el propio Ministerio del Interior italiano, que ha explicado públicamente el grave peligro que corren los heroinómanos de las grandes áreas metropolitanas europeas. La mezcla de estricnina con heroína ha ocasionado ya cerca de 50 muertes entre los adictos italianos.

La muerte de un heroinómano que se inyecte caballo adulterado con una dosis demasiado elevada de estricnina es especialmente "horrorosa", según fuentes médicas.

Los síntomas que suelen anteceder a la muerte en un caso de envenenamiento se inician a los pocos segundos del pinchazo, con una agitación psíquica y nerviosa anormal y desmesurada, rápidamente acompañada de sacudidas musculares y cierre de los maxilares, contracción que se registra casi simultáneamente en todos los demás músculos del cuerpo.

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La rigidez del cuerpo, tan marcada como la flexión del arco vertebral hacia atrás y el endurecimiento de la caja torácica hasta llegar a la paralización de la respiración, es otro de los efectos de la estricnina en la sangre de un ser humano.

Las alteraciones son aún más dolorosas en tanto que no se pierde el conocimiento, y cualquier luz o ruido contribuye a acrecentar el malestar, que termina con la muerte del envenenado.

El cadáver de quien muere de esta forma suele quedar con los ojos abiertos, desorbitados por el dolor, la angustia y el choque.

Dudas sobre las causas de las muertes de toxicómanos

La no correspondencia entre estos síntomas de muerte por envenenamiento de estricnina y los que presentaban los toxicómanos fallecidos, según los casos registrados desde principios de año en Barcelona, inclinan a la policía a deducir, en principio, que esas muertes no guardan relación con el sulfato de estricnina de mortales efectos.De todas formas, estas circunstancias sí indican muy claramente que los cortes de la heroína, muchas veces realizados de forma apresurada, se han convertido en el principal peligro para los adictos a la heroína de cualquier ciudad de la región catalana.

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