España y Francia mantienen unas "relaciones a tiros", según Manuel Fraga

Manuel Fraga, presidente de Alianza Popular, manifestó ayer, tras conocer el ametrallamiento de dos barcos españoles por una patrufiera francesa, que las relaciones entre ambos países son unas "relaciones a tiros". Fraga definió como "barbaridad incalificable" el ametrallanúento del pesquero español.El portavoz del grupo parlamentario de la Minoría Vasca, Marcos Vizcaya, manifestó que "las patrulleras francesas están haciendo la vida imposible a los barcos que faenan en la zona". Juan María Bandrés, dirigente de Euskadiko Ezkerra, calificó el incidente de "agresión salvaje" y expresó su condena "con toda su dureza". "Las lanchas rápidas de un país civilizado", dijo Bandrés", tienen suficientes medios para advertír a los pesqueros sin tener que disparar". Herri Batasuna, de Ondárroa, describió el ataque como una "inhumana agresión".

Además de las declaraciones del ministro de Asuntos Exteriores, Fernando Morán, su departamento facilitó un comunicado que señalaba que "ante la información, confirmada por la Embajada de España en París, de la detención y posterior acción violenta contra dos pesqueros españoles que se encontraban faenando en aguas comunitarias", el titular del departamento convocó al embajador francés en Madrid, Pierre Guidoni, y le ha solicitado información completa de los hechos.

Según el comunicado, Morán le indicó a Guidoni que "la utilización de medios violentos contra dichas embarcaciones españolas constituye un acto muy dificilmente justificable que puede tener repercusiones muy serias en las relaciones hispano-francesas". El comunicado señala que "el embajador de España en París ha sido instruido para que actúe del mismo modo y con igual firmeza".

Guidoni calificó de "muy grave" el incidente y dijo que el suceso "será investigado en profundidad por las autoridades francesas". Pero declinó hacer cualquier otro comentario y prefirió no pronunciarse sobre la posibilidad, de que este incidente repoercuta negativamente en la próxima visita que tiene prevista realizar a España el primer ministro francés, Pierre Mauroy.

Anoche, varias decenas de personas asistentes a una asamblea en la localidad pesquera Ondárroa (Vizcaya) hicieron patente su indignación por lo ocurrido.