La estabilidad mundial depende de la coordinación Norte-Sur, según el presidente de Colombia

La estabilidad del planeta en los próximos 25 años depende de la coordinación de estrategias entre el Norte y el Sur y del nivel de vida de aquel 80% de marginados. Así lo expresó el presidente de Colombia, Belisario Betancur, ante los 80 delegados de 25 países que participan en la conferencia Sur-Sur, que se realiza en la ciudad colombiana de Cartagena de Indias.Durante su intervención, Betancur se refirió muy especialmente a la situación de Latinoamérica en la economía mundial. "¿Cómo es posible que unos países se hayan especializado en la producción de materias primas, mientras otros se reservan la producción de manufacturas?", se preguntó el mandatario colombiano. La situación, según Betancur, no está claro que obedezca a una ley de la naturaleza, a un accidente histórico o a una conspiración internacional.

Para el presidente de Colombia, Latinoamérica, a pesar de enfrentarse a la crisis más aguda de su historia desde la gran depresión de los años treint.a, posee todavía capacidad de respuesta. Estas esperanzas están cifradas en el hecho de que América Latina ha entrado de lleno en la corriente de crecimiento moderno. Varios de los países del continente, recordó Betancur, son catalogados por el Banco Mundial como semiindustrializados, en la categoría de España o Israel.

El jefe del Estado colombiano analizó detenidamente las diferencias entre el Norte y el Sur y, en este sentido, señaló que las industrias del Norte muestran grados de obsolescencia tan altos, que no pueden sobrevivir sin fuertes barreras proteccionistas. "Las ventajas comparativas no son estrictas y no están dadas por una ley natural inmutable", dijo Betancur. Al respecto, agregó también que todos los países del mundo son capaces de aprender nuevos procesos tecnológicos y de producir eficientemente nuevos bienes.