Romanov, dogmático y antioccidental
Grigori Romanov, ingeniero que acaba de cumplir 61 años. Fue promovido en junio del año pasado por Andropov al puesto de secretario del Comité Central, puesto que comparte, junto con Constantin Chernienko y Mijail Gorbachov, con el de miembro del Politburó. Antes de ser ascendido a Moscú fue, durante 13 años, secretario del partido en Leningrado, donde fortaleció su posición política al mismo tiempo que convertía a las industrias de la capital en la que estalló la Revolución de Octubre en las más modernas y eficaces de la URSS. Pasa por ser autoritario, ortodoxo y antioccidental. "Si Romanov se hiciera con el poder, Occidente se encontraría frente a un duro dispuesto a mantener bien firme a Estados Unidos, todo lo contrario que Gorbachov", declara un diplomático occidental en Moscú.
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