Todos los líderes políticos se vuelcan en el primer día de la campaña vasca

Las primeras figuras de la política vasca entraron anoche en campaña participando en los primeros mítines y actos electorales, más de 30, que se celebraron ayer a lo largo de la geografía de Euskadi. Las capitales vascas amanecieron cubiertas de propaganda, y las radios transmitieron insistentemente las cuñas propagandísticas en esta primera jornada de una campaña que se anuncia particularmente intensa y disputada.Carlos Garaikoetxea, Txiki Benegas, Juan María Bandrés, Xabier Arzallus, Mario Onaindía, Txomin Ziluaga, Tierno Galván, Nicolás Redondo y otros dirigentes intervinieron en mítines en las tres provincias, mientras Ramón Jáuregui y Juan Manuel Eguiagaray visitaron por la mañana la empresa Nervacero.

Manuel Fraga llegó ayer a Vitoria, acompañado de Carlos Robles Piquer, para apoyar la campaña de Coalición Popular del País Vasco. Fraga dijo que él jamás utilizaría una fórmula como la de los GAL para combatir al terrorismo. "Siempre he dicho", indicó, "que quien siembra vientos recoge tempestades y que creer que la violencia iba a ser siempre unilateral era perder el tiempo". "Llegaremos a ser la primera fuerza en todos los Gobiernos autónomos", vaticinó el líder de Coalición Popular, para añadir que .aquí en el País Vasco vamos a tener un gran éxito electoral".

Se negó a comentar la posibilidad de que su partido y el PNV lleguen a un acuerdo poselectoral, limitándose a indicar que le une una gran amistad con Xabier Arzallus desde que ambos coincidieron en el Congreso como diputados. "No estoy de acuerdo con el presidente del PNV", puntualizó, "cuando dice que es necesario que Herri Batasuna esté presente en las instituciones". "Yo soy partidario", indicó, "de que los cargos de este grupo que apoyan al terrorismo estén en un lugar en el que no puedan dañar a la democracia".

Llamamiento a la paz

Juan María Bandrés, presidente de Euskadiko Ezkerra, manifestó por su parte, en un mitin celebrado en Urretxu (Guipúzcoa), que la consecución de un Euskadi en paz es hoy día un objetivo común a todos los vascos. "Sin embargo", subrayó, "no se puede predicar la paz desde la violencia; nadie puede abogar por la paz desde el asesinato y el terror y enarbolar esta bandera desde la represión y la tortura". "Se trata", añadió, "de conseguir un clima de convivencia, en el que la tolerancia y el respeto mutuo se sitúen por encima del sectarismo y la irracionalidad y de que nadie pretenda alimentar sus propios intereses sobre la división entre los vascos".Fernando López Castillo, antiguo dirigente de ETA Político-militar beneficiado de las medidas de normalización, efectuó en el mismo mitin un llamamiento a las organizaciones armadas para que abandonen definitivamente la violencia. "Entramos en ETA con la firme decisión de combatir al franquismo y con esta misma firmeza hemos abandonado las armas. El afianzamiento del proceso autonómico y el desarrollo de la democracia hace necesario hoy día", subrayó, "luchar en el terreno de la política por los mismos ideales de libertad y justicia".