Julián San Cristóbal tomó posesión como nuevo director de la Seguridad del Estado

El nuevo director de la Seguridad del Estado, Julián San Cristóbal, tomó ayer posesión de su nuevo cargo, en un acto celebrado en el Ministerio del Interior y presidido por el titular del departamento, José Barrionuevo. En este acto también tomó posesión, como subsecretario del ministerio, Rafael Vera, que hasta ahora ocupaba el cargo para el que ha sido nombrado San Cristóbal.El nuevo director de la Seguridad del Estado ha ocupado el cargo de gobernador civil de Vizcaya desde el pasado 16 de diciembre de 1982. Fue elegido alcalde de la localidad vizcaína de Ermua en 1979. Su nombre ha adquirido especial relevancia en los últimos 14 meses, ya que su gestión como responsable del Gobierno Civil ha sido calificada. de "dura" y "clásica" en numerosas ocasiones, informa Tonia Etxarri desde Bilbao.

Nacido en Bilbao hace 31 años, casado y, con un hijo, se afilió al PSOE en 1973. Cuatro años más tarde fue nombrado asesor de la presidencia del Consejo General Vasco durante el mandanto del socialista Ramón Rubial.

Cuando tomó posesión como gobernador civil, San Cristóbal afirmó que esperaba romper con el mito de la figura de gobernador como guardián del orden público

Sin embargo,su actuación en este sentido ha sido frecuentemente contestada por organizaciones políticas, sindicales y ciudadanas.

Los sectores nacionalistas más críticos señalan que en los momentos en que tenía que haber garantizado la seguridad ciudadana en un tono diferente al de sus antecesores, Julián San Cristóbal se vio "incapacitado" para realizar esa labor.

Hombre que tenía la confianza del dirigente socialista vasco Ricardo García Damborenea y del responsable del Mando Único para la Lucha Contraterrorista en el País Vasco, Francisco Álvarez, San Cristóbal se ha mostrado, en declaraciones públicas, entusiasta de las medidas policiales en el plan de lucha contra la violencia.

Cuando se celebraron las fiestas de Bilbao el pasado mes de aggsto, el gobernador tuvo serios problemas con amplios sectores ciudadanos y con los militantes del PNV al enviar a las fuerzas de seguridad del Estado al ayuntamiento para que colocarán en sus mástiles las tres banderas (la española, la local y la ikurriña). Anteriormente el alcalde peneuvista José Luis Robles había decidido que no ondeara enseña alguna en los mástiles del ayuntamiento, a fin de evitar posibles crispaciones.

En la operación limpieza que se llevó a cabo tras las lluvias torrenciales del pasado mes de agosto, los miembros de las comisiones de voluntarios que estaban realizando tareas de desescombro criticaron la "pasividad" de la Policía Nacional en el cometido. También fue discutida su actuacion cuando el 20 de noviembre se celebró en Bilbao una manifestación pacífica contra la OTAN y la policía cargó violentamente de forma indiscriminada, contra los manifestantes y los fotógrafos.