España pierde competitividad industrial en la clasificación internacional
La economía española es una de las más frágiles de Europa occidental. La situación de deterioro parece haber comenzado a cuajar, y, hoy día, nuestro país debe conformarse con ocupar un modestísimo decimonoveno lugar en el ranking internacional de la competitividad industrial que, desde hace cinco años y por estas fechas, publica el European Management Forum (EMF), una institución independiente de análisis y prospectiva radicada en Ginebra.España pierde, según el estudio, dos puestos con relación al año anterior, mientras que Japón y Suiza, apoyados "en una fuerza de trabajo motivada y productiva", continúan a la cabeza de la competitividad industrial, por ser los países que mejor han sabido hacer frente a la crisis. Los países nórdicos también mejoran mucho sus posiciones, y así, Suecia, que en la edición de 1983 ocupaba el noveno lugar del ranking, pasa ahora al quinto. Finlandia y Dinamarca ganan dos puestos, y Noruega, cuatro. Los países Bajos, en cambio, pierden cinco posiciones.
Estados Unidos conserva el tercer lugar, pese a que en materia de comercio exterior, inversiones y eficacia industrial (productividad y coste de mano de obra), los resultados son ligeramente inferiores a los registrados con anterioridad. Alemania Federal, a pesar del elevado índice de paro, ciertos problemas estructurales de su industria y algunas incertidumbres políticas, se mantiene en cuarta posición, seguida de Suecia (quinta), Finlandia (sexta), Austria (séptima), Noruega (octava), Dinamarca (novena) y Holanda (décima).
Canadá, que el año pasado ocupó la sexta posición, este año retrocede a la undécima, seguido de Australia y el Benelux. El Reino Unido (decimocuarto) y Francia (decimoquinta) registraron resultados ligeramente inferiores a los de 1983. Irlanda, en cambio, conserva su posición (décimosexta), e Italia (decimoséptima) y Nueva Zelanda (decimoctava) la, mejoran. España (decimonovena) encabeza el pelotón de cola, seguida de Turquía (vigésima), Grecia (vigésimo primera) y Portugal (vigésimo segundo), que continúa siendo el farolillo rojo de la competitividad industrial.
10 criterios selectivos
El estudio está hecho en base a 10 criterios: entorno macroeconómico, eficacia industrial, dinamismo del mercado, estructura financiera recursos humanos, papel del Estado, recursos naturales, apertura hacia el exterior, innovación y perspectivas de futuro y consenso y estabilidad sociopolíticos.
Cada uno de estos parámetros está debidamente ponderado por 284 variables, 227 de las cuales tienen una base estadística (ONU, OCDE, Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional, etcétera). Las 57 variables restantes se basan en apreciaciones subjetivas de dirigentes de empresa, personalidades de la política, las finanzas y el periodismo especializado, que en su día respondieron a una encuesta del EMF.
Según el informe, España ocupa la decimonovena posición,en cuanto a entorno macroeconómico y dinamismo. La peor posición la registra Esláña en recursos humanos, nivel de educación y estructura de manó de obra. La mejor, la más positiva, es el impacto del Estado sobre la economía. Respecto a la innovación, España ocupa el puesto decimonoveno.
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