Terrorismo internacional en España

El último atentado contra un diplomático extranjero en España se produjo el 16 de septiembre de 1982, en parecidas circunstancias al ocurrido ayer. En aquella ocasión fue asesinado a tiros el primer secretario de la embajada de Kuwait en Madrid, Sayed Hasart Najeb, cuando abandonaba la sede diplomática de su país a las 14.20.La policía española logró detener al agresor, el súbdito libanés, de origen palestino, Murad al Sami, de 28 años, que fue condenado a 30 años de prisión por la Audiencia Nacional, en marzo,de 1983.

Al Sami reivindicó la acción en nombre del grupo disidente palestino de Abú Nidal, facción radical a la que puede pertenecer también el presunto asesino del funcionario de la Embajada jordana, que, según testigos presenciales, era un joven de aspecto árabe.

Al contrario que otras capítales europeas, Madrid se ha visto relativamente libre de la violencia entre árabes e israelíes y entre grupos árabes o palestinos, que se ha extendido como consecuencia del conflicto en Oriente Medio y más recientemente de la guerra en Líbano.

La libertad de residencia y el reconocimiento de las autoridades españolas a todas las partes ha sido valorada en consecuencia y respetada su neutralidad.

Sin embargo, en los últimos meses, la policía española ha intensificado el control de residentes y visitantes árabes en España al haber aumentado el número de atentados, aunque no sobre personal diplomático, Concretamente, el mes de junio fueron tiroteados dos estudiantes de medicina, uno sirio y otro jordano, en Barcelona. El sirio Ibrahin Alkaalif resultó muerto; y el jordano Ahmad Dannun, gravemente herido.

El único grupo extranjero que ha permanecido activo en sus atentados con explosivos, aunque con una cadencia muy irregular, ha sido el de los armenios.

En el mes de julio pasado, la policía desactivó dos artefactos colocados por la organización Pueblo Armenio en la Gran Vía madrileña. El atentado con bombas de más graves consecuencias de este grupo fue el ocurrido en Madrid en diciembre de 1980, en el que resultó gravemente herido el entonces subdirector del diario Pueblo, y hoy director de ese periódico, José Antonio Gurriarán, y heridos de menor gravedad un padre con sus dos hijas pequeñas y un policía nacional.

Otros atentados en los últimos años fueron: El 12 de marzo de 1982 murió asesinado en Madrid el palestino Nabil Arankj Wadi; en abril de ese mismo año explosionaron dos bombas en los locales de las compañías aéreas de Jordania y de Egipto en la capital española, que produjeron cuantiosos daños materiales; en marzo de 1980, el abogado español Adolfo Cotelo fue asesinado en Madrid, al parecer debido a una confusión de identidad con el presidente de la Comunidad Judía, Max Mazín, que vivía en el mismo edificio.