_
_
_
_

Las organizaciones profesionales mantienen su oposición a discutir los precios de los productos agrarios

Las organizaciones de agricultores y ganaderos que han venido participando en la mesa del Fondo de Ordenación y Regulación de Precios y Productos Agrarios (FORPPA), para tratar de llegar a un acuerdo sobre la subida de precios de los productos agrarios sujetos a regulación de campaña, continuaron en la tarde de ayer con la postura adoptada desde el inicio de las mismas de no ofrecer una tabla de incrementos hasta que el Ministerio de Agricultura no presente un balance del cumplimiento de lo pactado para 1983. La Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos discutió, también ayer, la lista de nuevos precios presentada por el ministro de Agricultura, Carlos Romero. Aunque las negociaciones pueden continuar en la mañana de hoy, todo indica que el próximo Consejo de Ministros decidirá sobre la base de la propuesta de Agricultura.

El presidente del FORPPA, Julián Arévalo, en un intento de superar las diferencias existentes entre las organizaciones agrarias y la Administración, mantuvo durante el día de ayer reuniones bilaterales con cada una de las organizaciones del sector tras la pausa de las fiestas navideñas. A los problemas políticos por los que atraviesan algunas de estas organizaciones sectoriales se sumó, para el fracaso de estos contactos, el convencimiento de que se debería hacer un balance de lo pactado y cumplido en 1983 antes de pasar a discutir los temas de la próxima campaña.Para la CNAG -Confederación Nacional de Agricultores y Ganaderos- existe un problema de credibilidad respecto a los acuerdos aprobados por el Gobierno que deben superarse antes de discutir los posibles nuevos precios. Según este razonamiento, el Gobierno se comprometió en las anteriores negociaciones a compensar a los agricultores y ganaderos si los precios energéticos -fertilizantes, gasóleo y tarifas eléctricas y los de los productos de alimentación animal subían por encima de unos máximos fijados. Los incrementos de precios de la energía se han mantenido dentro de los establecidos en la claúsula de salvaguardia.

Los precios de los productos para la alimentación animal han crecido por encima de lo previsto. La depreciación de la peseta frente al dólar y los problemas derivados de la sequía estadounidense han sido la causa. Al sobrepasarse los niveles establecidos en la claúsula de salvaguardia se debería haber negociado cómo se instrumentaban las compensaciones prometidas por la Administración, en opinión de las organizaciones profesionales.

El Ministerio de Agricultura, por su lado, que reconoce la desviación de precios habida, argumenta que las compensaciones se han realizado de manera indirecta. El precio en el mercado de algunos productos cárnicos ha sido superior en los últimos meses al establecido como tope para que el FORPPA interviniera importando carne. Se han prohibido las exportaciones de productos susceptibles de aprovechamiento en la alimentación animal y se ha desviado trigo para el consumo humano hacia el consumo animal, con el fin de abaratar los costes de los ganaderos.

La posición de no hablar de precios por parte de la mayoría de las organizaciones del sector sin solucionar antes las otras cuestiones ha impedido que se llegara a un acuerdo de principio y la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos estudió ayer los precios propuestos por el Ministerio de Agricultura. El presidente del FORPPA, no obstante, suspendió la reunión global a celebrar ayer por la tarde y convocó una nueva para hoy a las 10 de la mañana, como último intento de llegar a soluciones conjuntas.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_