Polonia y España

He experimentado gran indignación al leer un artículo en EL PAIS sobre la vida de una familia en Polonia. Después de su lectura, una debe concluir que los polacos' viven miserablemente, mal comidos y mal vestidos. No soy de quienes piensan que los países socialistas son un paraíso, pero estoy convencida de que allí los trabajadores disfrutan de mejores condiciones de vida que en muchos países capitalistas, entre los que figura el nuestro.Y que quede bien claro que me estoy refiriendo a los trabajadores, no a otras capas o clases sociales que, efectivamente, en el capitalismo pueden disfrutar de mayores comodidades.Para establecer correctamente la analogía señalaré que en España muchas familias y muchos pensionistas no alcanzan a fin de mes y tienen serias dificultades para comer y vestir decentemente. Con retribuciones que oscilan desde pensiones de 20.000 pesetas a salarios medios de 50.000, ¿cómo se puede defender una familia si el kilo de carne cuesta 900 pesetas, el de plátanos 135, un abrigo 15.000, unas botas 5.000, los alquileres 15.001) y las guarderías y colegios otras 15.000? Muchos niños españoles no comen plátanos aunque en Canarias crezcan, a montones. En los países socialistas existe seguridad en el empleo, una enseñanza. pública y una sanidad también pública satisfactorias. Mientras, en nuestro país los trabajadores observan aterrados el futuro, plagado de interrogantes amenazadores. /