La 'democracia a la turca' entra en su última fase con el encargo de formar Gobierno a Turgut Ozal
Turgut Ozal, líder del Partido de la Madre Patria, fue encargado ayer de formar Gobierno en Turquía por el presidente, general Kenan Evren, informa la agencia de noticias Anatolia. Con ello, se entra en la última fase de la democracia a la turca, que tuvo su jalón más importante con las elecciones legislativas del pasado 10 de noviembre, que dieron a la formación de Ozal mayoría absoluta en el Parlamento.
El régimen militar que ahora desaparece, al menos en su expresión externa, fue implantado el 12 de septiembre de 1980, cuando fue derribado el Gobierno civil del conservador Suleiman Demirel. La devolución del poder a los civiles se inició con la aprobación de una Constitución que deja todavía fuertes poderes en manos del jefe del Estado (elegido él mismo al mismo tiempo que se aprobaba la nueva ley fundamental) y que establece fuertes restricciones a libertades políticas y sindicales básicas.Ozal, de 56 años de edad, quien fuera viceprimer ministro para Asuntos Económicos con el régimen militar, llevó a su partido a una aplastante victoria en las elecciones de hace un mes al conseguir para su grupo 211 de los 399 escaños del Parlamento.
El nuevo primer ministro, que aún no ha formado Gabinete, sucede en el cargo al almirante retirado Bulend UIusu, nombrado tras el golpe de Estado. Fuentes políticas de Ankara consideran muy probable que la constitución del nuevo Gabinete sea anunciada para finales de semana. Tras la preceptiva aprobación del Gobierno por el general Evren, Ozal intervendrá en el plazo de siete días ante el Parlamento para presentar su programa.
El Consejo Nacional de Seguridad, formado por Evren y otros cuatro generales, cesó oficialmente el martes en sus funciones de órgano ejecutivo máximo. Los integrantes del Consejo -que actuaba también como Senado mientras la Asamblea Consultiva, prácticamente elegida a dedo, hacia la veces de Cámara Baja- aconsejarán durante seis años al presidente Evren en "el control de la democracia". Antes de cesar, el Consejo promulgó una ley por la que se prohíbe a 242 dirigentes políticos de los extintos partidos hacer ningún tipo de declaración pública sobre la política interior o exterior turca. Esta nueva ley viene a reforzar la Constitución en vigor, que prohíbe a los antiguos dirigentes de partidos intervenir en la vida política nacional durante 10 años. Los nuevos partidos, de los que sólo se autorizó a tres a concurrir a las elecciones, no podrán referirse en ningún momento a los anteriores dirigentes partidarios, ni para elogiarlos ni para criticarlos, según los términos de la ley. Este texto legislativo viene a completar la impunidad que garantiza la Constitución a los militares al prohibir toda polémica sobre las declaraciones realizadas durante estos tres últimos años.
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