Razas y religiones

El motivo de nuestra carta es llamar su atención sobre algunos puntos de la información y algunas confusiones que pueden dar lugar a la propagación del racismo y cuanto más que EL PAIS es el periódico de mayor tirada.Con eso nos referimos a los hechos siguientes:

1. Siempre se especifica que el delincuente es gitano cuando por casualidad ha delinquido un individuo perteneciente a aquella minoría (dejando bien claro que nunca se dice un delincuente payo). Pedimos, pues, que no se relacione el color, raza, religión, orientación sexual o ideología con una actitud social.

2. Lamentamos la continua confusión entre los términos judío e israelí. Si la primera es un hecho lamentable y ridículo, la segunda, aparte de demostrar una ignorancia lingüística entre el significado de judío o israelita (religión) e israelí (nacionalidad), crea la mayor y peligrosa confusión de integrar a millones de judíos (no israelíes) en un asunto político al cual son totalmente ajenos. Las dos palabras no son sinónimos, los israelíes no son obligatoriamente judíos.

En respuesta de los derechos humanos a la propia imagen y por el derecho del ciudadano a una información verdadera e imparcial, exigimos que se pongan las cosas en su lugar / Asociación Pro Derechos Humanos.